El traslado de la Capital a la Patagonia

Dos revoluciones geopolíticas que se potencian entre sí.

Por Rafael Garzón


El texto que sigue fue la versión taquigráfica de la conferencia pronunciada en una reunión organizada por el CENTRO DE INVESTIGACIONES PATAGÓNICO en 1992 en Comodoro Rivadavia en la reunión llamada "PENSANDO LA PATAGONIA DESDE LA PATAGONIA", en un Simposio de Reordenamiento Territorial. Se encontraban presentes muchos importantes geopolíticos del país. La transcribimos con algunas actualizaciones enmarcadas entre paréntesis que se distinguen claramente.

Debo ante todo agradecer al CEIPA la oportunidad que me brinda de estar aquí con Uds. Y expresarles el pensamiento, no personal, sino de un grupo de gente que está trabajando desde Córdoba a través de la publicación de libros, artículos periodísticos y programas de radio, concretamente dos : Uno de emisión semanal que se llama PATAGONIA , BASE DEL DESARROLLO NACIONAL y otro que es un micro que se propala diariamente a las 8 y media de la mañana, en una tarea sin tiempo que seguirá hasta que el éxito culmine nuestras expectativas. Los grupos se llaman "ARGENTINA SEGUNDO CENTENARIO" y "CENTRO DE RESIDENTES Y AMIGOS DE LA PATAGONIA".

Este año se ha conmemorado el quinto centenario del Descubrimiento de América. Permítanme Uds. que comience con un homenaje a este quinto centenario en el recuerdo de un pensamiento maya : "LAS RAÍCES DE LAS COSAS ESTÁN TODAS ENTRELAZADAS. SI QUIERES TALAR UN ARBOL, CAE UNA ESTRELLA. POR ESO, CUANDO QUIERAS TALAR EL ÁRBOL, DEBES PEDIR PERMISO NO SOLAMENTE AL CUIDADOR DE LA SELVA SINO TAMBIÉN AL CUIDADOR DE LA ESTRELLA". Desde luego, sin mirar a extremos sublimes de la poesía o de la filosofía, existe un mundo mucho más pragmático, mucho más pedestre, casi prosaico, de realidades en las cuales las cosas está todas articuladas entre sí, de forma tal que existen consecuencias de unas decisiones con respecto a las otras, y eso lo hemos estado escuchando acá, en estas mismas disertaciones, reiteradas veces, en el curso de estos días.

Veamos qué nos dicen los manuales de geopolítica sobre la esencia de la problemática nuestra, la problemática substancial de la República Argentina.Muchos de Uds. son geopolíticos y saben que lo que yo voy a leer acá es solamente una muestra, una pequeñísima muestra de lo que en realidad todos conocen.

Veamos lo que dicen LUIS DALLANEGRA PEDRAZA y col. Sobre el tema en su libro LOS PAÍSES DEL ATLÁNTICO SUR. "De acuerdo al último censo de población más de la mitad de la población del país se localiza en la provincia de Buenos Aires y Capital Federal. Si se le suma Santa Fe y Córdoba, la misma asciende a las dos terceras partes. Esta situación se fue agravando en los últimos años por las migraciones internas que agregan población". Y sigue ... y termina por fin el párrafo "El 65 % del producto bruto geográfico se genera en la Provincia de Buenos Aires y la Capital y llega al 80 % con Santa Fe y Córdoba, el 90 % del producto industrial se localiza en Buenos Aires, Santa Fe, Córdoba y Capital Federal", etc., etc. Pero vamos a ver qué nos dice otro libro. Este libro está escrito por ISSOLA BERRA, JUAN PUIG, JUAN ROCCATAGLIATA y JORGE FRAGA . Se llama INTRODUCCIÓN A LA GEOPOLÍTICA ARGENTINA. Después de hacer un breve análisis sobre la ciudad de Buenos Aires, menciona y esto es textual " LOS GRAVES PROBLEMAS QUE CREA POR SU UBICACIÓN EL PUERTO DE BUENOS AIRES" (pág. 82), y menciona luego que es de esperar que nuevos descubrimientos valorizando aún las costas del Sur, "alivien en parte los problemas político-económicos que el gran Buenos Aires HA CREADO AL VALORIZAR DESPROPORCIONADAMENTE SÓLO UNA PARTE DEL LITORAL SITUADA EN UNO DE SUS EXTREMOS" (pág. 85).

JUAN A. ROCCATAGLIATA, en su libro ARGENTINA HACIA UN NUEVO ORDENAMIENTO TERRITORIAL, DE LA CENTRALIZACIÓN A LA DESCENTRA-LIZACIÓN... , considera que el sistema urbano argentino es "CONCENTRADO", "ALTAMENTE DESEQUILIBRADO", "CENTRALIZADO Y RADIOCÉNTRICO" (pág. 40). Y sintetiza un modelo que propone "la valorización total de TODO EL TERRITORIO NACIONAL..." , con "metrópolis o subsistemas urbanos de equilibrio o alternativa para la descentralización y la desconcentración del Gran Buenos Aires y el desarrollo interior" (pág. 142).
Pero veamos qué dice en su libro GEOPOLÍTICA Dn. GUILLERMO TERRERA. El primer párrafo del primer capítulo sobre los problemas geopolíticos argentinos , que se llama "MACROCEFALIA PATOLÓGICA ARGENTINA", dice así : "LA CAPITAL FEDERAL Y SU ENORME, INTRINCADO CONURBANO, AL CUAL SE DENOMINA GRAN BUENOS AIRES, REPRESENTA UNA DISTORSIÓN ABSOLUTA PATRA EL ESPACIO VITAL Y LA POBLACIÓN DE LA REPÚBLICA ARGENTINA, FRUTO DE UN DEJAR HAVCCER IRRESPONSABLE QUE PERTENECE POR IGUAL A LOS VARIADOS GOBIERNOS QUE SE SUCEDIERON EN LARGAS DÉCADAS DE LKA VIDA NACIONAL".
Permítanme Uds. que, simplemente con el objeto de graficar en cifras lo que estoy diciendo, les muestra a Uds. que la población de la Capital Federal, de acuerdo a este libro, de publicación de 1983 (después parece ser que ha disminuido un poco), es en la Capital Federal y Gran Buenos Aires, extendiendo la zona de influencia hasta La Plata, de 14 millones de habitantes. Trece millones dijo el Dr. Roccatagliata ayer, en su disertación. Muy Bien. Aceptemos que sean 13. Eso lleva al 48 % de la población argentina . Supongamos que no sea el 48 %, que sea el 42 %. ¿Cuántos habitantes hay en el interior del país ? Quince millones quinientos mil. Desde Concordia hasta Córdoba, desde Córdoba a Río Cuarto, desde Río Cuarto hasta Bahía Blanca (HACER GRAFICO ¡!!!), esa es la zona de concentración de toda la población argentina.

Una gran parte del país está casi deshabitada, y lo que es peor, la Patagonia, despoblada y Santa Cruz, con una densidad de población de 0,5 habitantes por Km. Cuadrado . (Vale la pena destacar que estas cifras han mejorado algo desde entonces, ya que esta conferencia fue pronunciada hace nueve años).

Es absolutamente indispensable modificar esto. Esta situación no puede seguir manteniéndose. Ahora alguien se preguntará, "Cómo es posible que eso se haya dado, a qué se debe, a qué magia se debe que esto se haya producido de esta forma??" Y bueno, en realidad acá no hay magia alguna. La realidad es que de los 14.000.000 de habitantes que habitan en Buenos Aires, 10.150.000 son argentinos . De esos 10.000.000 , 8 millones son la población originaria de la Capital Federal y Gran Buenos Aires. Eso significa que 2.150.000 son provincianos emigrados a Buenos Aires. (Estos valores, muy posiblemente se han aumentado en magnitud en los últimos años, por las circunstancias económicas que se instalaron en el país en la última década del Siglo XX , que llevaron al desempleo que actualmente sufrimos. El mismo fue primeramente perceptible en las provincias argentinas, especialmente las periféricas, lo que llevó a una amplia corriente emigratoria hacia Buenos Aires, con el consiguiente incremento en Villas Miserias, desempleo en dicha región y delincuencia y marginalidad asociados a la pobreza, en gran medida exportada desde el interior del país a la Capital). Además de eso existen 3.850.000 extranjeros, el 27 % del total. ¿A qué se debe que toda esa gente se vaya a Buenos Aires? Lógicamente, por las ventajas comparativas que allí esperan encontrar, la concentración de industrias, de comodidades y de posibilidades. ¿Pero, eso es todo? No, Desde luego que no. Existe un SUBSIDIO REAL O ENCUBIERTO que es obvio para el que tiene posibilidades de comparar lasa cosas. Por de pronto, tomemos los impuestos. En cualquier provincia se paga por un predio urbano el IMPUESTO MUNICIPAL y separadamente, el PROVINCIAL. ¿Y en la Capital? Ah, no. En Buenos Aires se paga solamente el MUNICIPAL, NO EL PROVINCIAL. ¿Qué pasa con la electricidad? La electricidad es subsidiada. ¿Qué significa eso? La electricidad subsidiada significa menos gasto de luz eléctrica, pero significa también que las fábricas producen mercadería subsidiada, que venden a precio más bajo y en una actividad competitiva desleal con todas las otras provincias. (En los últimos años, se han vendido los FFCC nacionales al capital privado, con el principal argumento de que gastábamos 2 millones de pesos diarios en subsidiarlos. Aproximadamente EL MISMO SUBSIDIO SUBSISTE en los FFCC del Gran Buenos Aires y Subterráneos de la Capital Federal, que desde luego, sigue pagando TODO EL PAIS para beneficio de empleados y obreros que trabajan en Buenos Aires, lo que contribuye a una subvención indirecta a las empresas capitalinas). Cuando alguien ha dicho : "Patagonia, zona pobre", yo me pregunto: Qué pasaría si a las Provincias de Neuquen y de Río Negro se les pagase la electricidad que consume diariamente la ciudad de Buenos Aires? Y alguien podrá decir : "Un momento ¿Y porqué se les va a pagar?" Entonces se podría contestar : "¿No se le piensa pagar a Paraguay la electricidad de Yaciretá, y para colmo se le va a paga muy bien? ¿Porqué entonces no se le va a pagar a Neuquen y a Río Negro? Y se dirá : "Los diques fueron construidos por Agua y Energía. ¿Y quién les dio los fondos a Agua y Energía ? La Nación. ¿Para que hicieran obras que fueran a beneficiar a Buenos Aires? No. La Nación , todos los que estamos aquí, nosotros lo hemos hecho en primer lugar porque creíamos que como parte de la obra se iba a irrigar un millón de hectáreas, de lo cual, NO HAY NADA . Y además lo hicimos para que gran parte de esa electricidad quedara en la Patagonia. Si en algún lado debió haber subsidio debió ser en Neuquen y en la Provincia de Río Negro, no en Buenos Aires.

El mantenimiento de una supuesta "Policía Federal" y "Justicia Federal", que son en realidad ABSOLUTAMENTE PORTEÑAS en Buenos Aires y PAGAN TODAS LAS PROVINCIAS. La subvención al desempleo, que representa una frondosísima burocracia estatal , en gran parte inútil en esta época de informática y computadoras, con un desconocido porcentaje de empleados "ñoquis" en la Capital, que también mantienen las provincias ... La enorme cantidad de jubilaciones de privilegio , que en gran proporción se dieron en Buenos Aires, resta posibilidades al jubilado del interior.

La Nación, o sea los habitantes de todas las provincias, les pagan a los porteños el Hospital San Martín, de Clínicas, dependiente de la UBA, la Biblioteca "Nacional", existente en la Recoleta, los Museos, las cárceles, la Terminal de Ómnibus, los subterráneos y trenes suburbanos. Para pagar las autopistas porteñas las provincias debieron contribuir con 400 millones de pesos. Es decir que un jujeño o un fueguino poseen ladrillos de las autopistas porteñas: No esto disparatado? ¡Todo junto! Si hasta lasa cloacas del Gran Buenos Aires deben ser pagadas finalmente por las provincias, con el argumento de que allí viven muchos provincianos!

¿Porqué no se cobran con igual argumento, a Bolivia ya que en Buenos Aires vive un millón de bolivianos? ¿O a Paraguay, ya que allí viven un millón de paraguayos? ¿O a Uruguay, ya que en Buenos Aires viven 700.000 uruguayos? Buenos Aires, teniendo como en realidad tiene, el poder administrativo de resolver siempre en beneficio propio , se beneficia a sí misma en detrimento de las provincias, La aceptación de Buenos Aires de 430.000.000 de dólares de una deuda a Chubut y de 800.000.000 a Neuquen por regalías mal pagadas, son clarísimos ejemplos de lo que afirmamos. Eso es algo que no tiene posibilidad de mantenerse ya más tiempo. Pase lo que pase, no puede mantenerse más tiempo. Entonces alguien pensará que eso se va a solucionar. Y todo lo contrario. Empeorará más aún con el correr del tiempo. Nosotros estamos enfrentados a un proyecto que realmente es formidable. Es el proyecto del MERCOSUR. El proyecto de la Integración Latinoamericana, que ojalá algún día se concrete, no solamente con loa 4 países del MERCOSUR, sino también con Chile y Bolivia y después con Venezuela y más allá. ¿Cuál es la única obra importante, que está siendo en este momento estudiada en conjunto por los países del MERCOSUR? La Hidrovía Paraná-Paraguay, que es absolutamente indispensable reestudiar a fin de evitar que la CANALIZACIÓN DEL PANTANAL en el Río Paraguay pueda determinar SISTEMÁTICAS INUNDACIONES ANUALES EN EL LITORAL ARGENTINO. Esa obra, de inspiración brasilera inicialmente, fue tomada con gran interés por la Argentina. Es una obra formidable. Significa desde l punto de vista práctico que el eje geopolítico argentino actual, que esta tirado desde San Lorenzo a La Plata, no se desplace gracias a la integración a un eje desde Montevideo a San Pablo. Gracias a este proyecto, ese eje nuevamente se vuelve a desplazar a territorio argentino, por 1.850 Km. Y entonces se establece una gran vía comercial. ¿Qué significa eso desde el punto de vista práctico, desde el punto de vista geopolítico? Que durante 20-40 años , si las cosas se realizan como se espera que algún día se realicen, toda la inversión privada y oficial de la República Argentina, y también desde luego de Paraguay y Uruguay y Brasil, va a estar focalizada en la zona de Curumbá-Río de la Plata. ¿Y eso es malo o es bueno? Formidable! Pero cuidado! Porque una vez más significa concentrar todo el esfuerzo argentino en la zona media del país. Una vez más significa concentrarse en la Pampa Húmeda y en la zona central, que desde luego tiene una derivación hacia Chile y hacia las Provincias de Cuyo y otra hacia Buenos Aires. De allí la pregunta que formulé hace un par de días : "Alguien puede informarme si es que se ha pensado en la posibilidad de utilizar este enorme esfuerzo también como un medio de producción hidroeléctrica a través del cierre del Chapetón o algún otro (Paraná Medio)? No, se contestó aparentemente no. ¿Y cabrá la posibilidad, además de eso, de sumarle a la planificación ya existente , un proyecto complementario que lleva a la Canalización del Bermejo, lo cual supone toda una revolución geopolítica para la zona del NOA y también desde luego para la zona del Sur de Paraguay y la región del Sur de Bolivia y el Norte de Chile? Nosotros en Medicina , cuando queremos hablar de Patología del Subdesarrollo hablamos de la Patología que encontramos en el NOA. ¿Cuál fue la respuesta? No, no hay nada. Vale decir, que en este preciso instante, la imagen de la concentración del esfuerzo de todo el país durante una treintena de estaría concentrada allí y solamente allí. Entonces más tarde pregunté : "¿Existe la posibilidad de que se esté estudiando un puerto de aguas profundas en Puerto Madryn, o uno de ultramar en San Antonio Oeste?" ¿Con qué objeto? Y bueno, muy simple. No sacar la mercadería por el puerto brasilero de Santos. Y entonces se me respondió : "Bueno, eso hay que verlo, porque es preferible estudiar si el millaje o kilometraje es más de un lado que de otro". Basta mirar un mapa y ustedes se darán cuenta que tienen 2.500 Km. Para Santos y 900 para la Patagonia. Claro, puede haber concesiones necesarias desde el punto de vista político, pero lo real es que desde el punto de vista de la distancia, aparentemente no hay ninguna posibilidad de duda. (En este preciso momento , año 2001, se están proyectando obras en el puerto fluvial, "barroso" , de Buenos Aires, para seguir manteniendo una estructura que sólo beneficia al "establishment" en detrimento del país).

Por otra parte, creemos que el CEIPA puede hacer mucho para auspiciar una nueva idea-guía . Esa idea-guía es la de "marchar hacia el Sur". La marcha hacia el Sur en la política argentina que pueda de alguna forma imitar lo que Brasil hizo con su marcha hacia el "desierto verde" o como la que realizara EEUU el siglo XVIII hacia el Oeste. Esa marcha hacia el Sur, unida a la posibilidad del traslado de la capital, tal como lo hicieron otros países que tuvieron la necesidad de cambiar su esquema geopolítico, como por ej. Brasil, cuando la cambió de Bahía a Río de Janeiro y posteriormente de Río de Janeiro a Brasilia; EEUU cuando cambió su capital de Filadelfia a New York y de New York a Washington; Rusia cuando la cambió de Moscú a Leningrado, y de Leningrado posteriormente de nuevo a Moscú; de China, cuando la trasladó de Shangai a Pekín; Turquía, cuando la trasladó a Ankara, en donde actualmente está, desde Constantinopla; lo mismo Canberra y con la seguridad de que esto de ninguna forma significaría la posibilidad de disminución de la riqueza, del lujo, del bienestar, de Buenos Aires. Todo lo contrario. Impediría el hacinamiento futuro, la insuficiencia de servicios y el auge de lacras sociales por superpoblación, como actualmente existen .

Ni Los Angeles ni New York son la capital de EEUU. Tampoco lo es Sao Paulo en Brasil. No Toronto en Canadá. Y sin embargo son las ciudades más grandes de sus respectivos países.
Les agradezco mucho que me hayan escuchado. Mis palabras no han conllevado el deseo de agraviar absolutamente a nadie. El énfasis que he podido dar a mis frases es el contenido desde 1810 y que cristalizara en las opiniones de San Martín, el Deán Funes, Artigas, Sarmiento y mil más, quienes no querían que la capital permaneciera en Buenos Aires.

Énfasis, sí. Vehemencia, sí. Pero de ninguna forma deseo de agresión. Lo que sí debe encontrarse en mis palabras, es una postura de lucha franca y clara en pro de la Patagonia.

El traslado de la Capital con un enfoque realista

ARGENTINA, SEGUNDO CENTENARIO
Por Rafael Garzón


Hace un tiempo tuve oportunidad de visitar Viedma-Carmen de Patagones, y allí pude recoger datos que serían sorprendentes de no provenir de nuestra Patagonia, esa eterna desconocida, menospreciada por algunos, saqueada por depredadores en el pasado y que hoy hay quienes pretenden convertirla en el basurero nuclear del mundo. Un testimonio que se menciona frecuentemente aquí y allá, a poco de comenzar una conversación de alguna profundidad sobre el tema, es el recuerdo de un cuento de ciencia ficción, publicado hace menos de una década por el ingeniero San Martín en el diario "Río Negro"; posteriormente habría sido reproducido por "Clarín" y la revista "CONO SUR".

El título del cuento ya representa, de por sí, una advertencia, casi una amenaza: "El día que Argentina perdió la Patagonia". Al parecer, el autor supone un estado de conflicto entre las provincias patagónicas, que reclaman por pago justo y en término la provisión energética a la Nación, concretamente de gas, petróleo e hidroelectricidad, reclamo al cual el Estado no puede atender. Teniendo en cuenta la disminución progresiva de la reserva petrolífera, las provincias patagónicas envían un ultimátum al gobierno el cual, una vez más, desoye la soliciotud. Ante esto, los gobiernos patagónicos, actuando en forma conjunta, amenazan cortar la provisión de gas en los gasoductos, el petróleo en los oleoductos, y el suministro eléctrico del Chocón-Cerros Colorados, sin el cual, como se sabe, al estar Atucha I fuera de funcionamiento, en Buenos Aires no podría prenderse ni una bombita ed luz. Inmediatamente después, todas las provincias patagónicas, actuando mancomunadamente, denuncian el Pacto Federal y resuelven declararse independientes al mejor estilo Letonia, Armenia, Georgia, Croacia o Eslovenia y se convierten en un Estado soberano, que inmediatamente es reconocido por Chile, Inglaterra y otras naciones de la Commonewealth, Estados Unidos y otras naciones. Y cuando el gobierno argentino intenta movilizar el Ejercito para recuperar el territorio nacional, se encuentra con que se han concretado alianzas entre diferentes naciones, lo que ha convertido al problema en un conflicto internacional, cuyo final es fácilmente predecible, con submarinos atómicos ingleses capaces de portar armas nucleares a las puertas de Buenos Aires. ¿Qué este es un cuento disparatado?...¿Qué su concreción es imposible?... Tal vez. Pero a poco de comenzar a hablar de temas que rocen el olvido y casi menosprecio que el país dispensa a nuestra eventual zona receptora de la basura del mundo, el recuerdo de este cuento surge de inmediato, como un cauce, no sólo literario, que recoge el resentimiento de muchos años.Hace algún tiempo se hablaba con frecuencia del traslado de la Capital de la Nación a Viedma de Patagones.

El gobierno de aquel entonces pareció resolver de por sí y ante sí, con la participación afirmativa de todos los partidos políticos en el Congreso Nacional, uno de los problemas estructurales más acuciantes del país. Pero el impacto propagandístico de éste hecho, de por sí revolucionario, fue relativamente escaso.

Y la mayoría de la población, absorbida por la urgencia de los bajos sueldos, por la gravedad de la inflación, por el impacto de temas coyunturales (ley de divorcio, alzamientos militares, Beagle), permaneció en silencio, a la expectativa, como shockeada.Pocos ubicaron que el nuevo distrito federal quedaba en el extremo norte de la Patagonia, casi en la pampa húmeda, a miles de kilómetros de Ushuaia, con un clima comparable al de Mar del Plata.Inclusive se acuño la expresión "al sur, al mar, y al frío, casi como una invocación al heroísmo, que el visitante de la zona no puede menos que considerar exagerada ., tal vez apropiada a Río Gallegos, pero de ninguna forma aplicable a la muy agradable y muy bella dupla Viedma-Carmen de Patagones, comparable a Bad Godesberg junto a Benn.Luego se constituyó el Ente para el Traslado de la Capital (Entecap) -1987/88- formado por un arquitecto como presidente, un ingeniero como vicepresidente y siete vocales, cuatro de los cuales eran arquitectos o ingenieros. Y la Comisión Técnica Asesora comenzó a trabajar intensamente.En un tiempo relativamente breve se efectuó toda clase de análisis comparativos y se estudió el problema desde el punto de vista económico; urbanístico; sociodemográfico; energético; turístico, etcétera. En algunos casos se llegó a un cálculo futurológico, deduciéndose que para el año 2025 la población total del nuevo distrito federal sería de 554.000 habitantes (población urbana), cifra que hoy parece exagerada si se piensa que para 1989 se calculaba en 175.000 y hoy, en enero de 1992 cuenta con 65.000.Se calculó que debían trasladarse desde Buenos Aires 25.905 empleados, correspondientes a los poderes Ejecutivo, Legislativo y Judicial. Y se diagramó la superficie a construir: 7.777.473 metros cuadrados en doce años, que surgirían de 5.700.000 metros cuadrados para viviendas; 480.000 para edificios públicos principales; 405.965 para nuevas escuelas, colegios secundarios e institutos de enseñanza terciaria; 84.300 para servicios de salud, etcétera. Dentro de los servicios vinculados a la salud pública se preveía la construcción de 19 centros de salud, con hospitales con capacidad para 1.050 camas y un hospital de alta complejidad con 350 camas. Todo esto para una capital de 354.000 habitantes calculados para el año 2000.El valor de éstas cifras surge de comparar las posibilidades de nuestro hospital-escuela universitario, nuestro viejo hospital de Clínicas "Pedro Vella", con capacidad aproximada a las 250 camas, en la ciudad de Córdoba, con más de 1.000.000 de habitantes y con un amplio radio de influencia en las provincias vecinas.Parecía que nada de lo que había era aprovechable. Que todo debía ser nuevo: casas, escuelas, edificios públicos, Municipalidad... Nada de lo viejo podía rescatarse. Hasta se planificó una nueva Iglesia Catedral. El grupo de técnicos , influidos por arquitectos e ingenieros, planificó (y lo hizo muy bien) "la" capital. Desde luego la "nueva" capital. Y eso era muy caro. Para la inversión pública eso significaba la suma -nada despreciable- de 2.231 millones de dólares, en doce años...En Enero de 1992, dos puentes unen a Viedma-Carmen de Patagones. Uno al Este y el otro al Oeste. El tránsito por cada uno de ellos es, para decirlo eufemísticamente, reducido. Pues bien: la comisión planificó, además de dos extensiones, otros puentes vehiculares y peatonales.

En algunos gráficos se dibujan ocho, y en otros nueve puentes previstos, para una población total calculada entre 170.000 y 800.000 habitantes, en plena época de teléfonos y fax.Y así, el indispensable y urgente salto al futuro que representaba el traslado de la capital , en sí toda una revolución geopolítica en nuestro país, se desjerarquizó y quedó convertido en mero asunto urbanístico. Y como tal desatendible si existían urgencias económicas prioritarias.Y tal hecho constituyó, en mi modesta opinión, un tremendo error. Un error de consecuencias imprevisibles, que debemos corregir. En primer lugar, porque no era necesario crear una nueva ciudad donde ya existían dos desde 1779. Y además, porque allí existen edificios públicos perfectamente utilizables por la administración nacional (Ministerio de Economía; Ministerio de Asuntos Agrarios: Tribunales Federales; etcétera). Y también porque desde 1985, cuando se planificó el traslado, hasta hoy, se han construido en Viedma 6.000 viviendas, de las cuales faltan entregar 1.800, y 3.000 más en Carmen de Patagones, que están en distintas etapas de paralización de obras.Es decir que, entre Viedma y Carmen de Patagones, existen nuevas viviendas para aproximadamente 42.000 habitantes. ¿Y cual es la población de ambas ciudades en el momento actual?: Aproximadamente 60.000 a 65.000.Es obvio que lo edificado lo ha sido con miras al cambio de la capital... Posiblemente para albergar a los 26.000 empleados a trasladar desde Buenos Aires. Y que esto, ya construido, cubre al menos una gran parte de las nuevas viviendas necesarias calculadas.Además e las viviendas populares, se han construido los nuevos desagües de Viedma, con sus correspondientes bombeos a desnivel, útiles para una población e 75.000 habitantes, y se ha construido un edificio de Tribunales Federales de seis a siete plantas, desempeñándose en Viedma un solo juez federal.

Hay, pues, bastante hecho. Y existen, además de los edificios públicos ya mencionados, la Casa de Gobierno, residencia del gobernador, y alguno más que pueden aprovecharse.El traslado de la capital es una urgencia desde 1810. Y efectuándose el mismo hacia el sur, puede agrandar el país, extenderlo hacia la Antártida.Además, la capitalización de Viedma-Carmen de Patagones garantizaría, por si fuera poco, la concreción de un puerto de aguas profundas en San Antonio Este. Ante esta realidad: ¿no sería oportuno retomar la idea del traslado de la capital con un nuevo enfoque realista?Creemos que es necesario reubicar el problema en un contexto esencialmente político, que permita al país proyectarse al futuro, intentando corregir la peligrosa y única concentración del 30 por ciento de su población total en una sola ciudad capital, la cual mantiene, por eso mismo, como nuestro principal puerto de ultramar, "un pantano cruzado por un estrecho canal", y también de paso, como el puerto más caro del mundo...



Propuestas para el traslado de la Capital Federal

Por el Lic. Alfredo Armando Aguirre

1. El presente desarrollo apunta a demostrar que existen alternativas que posibilitan autoconcebir, autoconstruir y autofinanciar la Nueva Capital argentina. El mismo no es mas que una consolidación de las elaboraciones y comunicaciones que venimos realizando sobre el particular.

2. La tesis básica de la propuesta sostiene que: tanto en el seno de los diversos estamentos del Estado argentino (Nación, Provincias y Municipalidades) como en el seno del tejido comunitario, se cuenta con el potencial humano y con los recursos materiales para realizar la Nueva Capital, minimizando costos y maximizando posibilidades de desarrollo personal y comunitario. Solo se requiere una adecuada movilización y coordinación que promueva y/o encauce las fluencias de participación y creatividad que se desencadenen.

3. La localización escogida facilita la construcción y el funcionamiento de la Nueva Capital a muy bajos costos. Algunos de los ingredientes de esa aseveración son los siguientes:

3.1.) La infraestructura existente en materia de transportes y comunicaciones;

3.2.) La posibilidad de autoabastecimiento de víveres frescos (frutihortícolas, carnes, lácteos, pescados y frutos del mar);

3.3.) La inexistencia de restricciones para el abastecimiento de agua potable;

3.4.) Un clima benigno propicio para la productividad (14 C de temperatura media anual);

3.5.) Energía proveniente de fuentes renovables (represas de los ríos Neuquen, Limay y Colorado);

3.6.) Arena y canto rodado aptos para la construcción, tanto en el lecho del río Negro, como en la Bahía de San Blas, y

3.7.) El río Negro como vía navegable.

4. Las posibilidades del río Negro como vía navegable, merecen un Tratamiento mas detallado, porque su utilización intensiva, bajar sensiblemente tanto los costos de construcción como los de funcionamiento de la Nueva Capital. El motivo es contundente: De acuerdo a los cánones técnicos el transporte por agua es como mínimo treinticinco (35) veces mas barato que el transporte por carretera. Ello significaría:

4.1.) Que un sistema de cruces por balsas minimizaría la necesidad de construir nuevos y costosos puentes sobre el río;

4.2.) Que un sistema de transporte de pasajeros, sea a través de naves tipo aliscafo o
vehículos de colchón de aire, podría ser implementado a lo largo del río y eventualmente salir al mar;

4.3.) Que el abastecimiento de víveres frescos podría hacerse por embarcaciones fluviales, que incluso posibilitarían la reactivación productiva de las islas aguas arriba, como de las lanchas pesqueras que volverían a aventurarse al mar;

4.4.) La tecnología naval existente posibilita que en el mismo curso del río, o en la Bahía de San Blas, o en el desaprovechado puerto de ultramar de San Antonio
Este, se efectúen las operaciones emergentes para la construcción o las mudanzas necesarias, sin saturar el sistema carretero;

4.5.) Las márgenes del curso inferior del río podrían servir para apostar embarcaciones que sirvieran de alojamiento y oficinas para el obrador respectivo;

4.6.) El río puede volver a ser utilizado para el acuatizaje de h hidroaviones, con lo que se incrementaría la oferta de transporte a‚reo, sin necesidad de construir nuevos aeropuertos y optimizando el empleo de las pistas de Viedma, San Antonio Oeste y Patagones, las dos primeras ya pavimentadas.

5. De acuerdo con lo anterior lo que habría que diseñar y construir serian las viviendas, los edificios públicos y el equipamiento urbano correspondiente (que comprende los servicios públicos). En esa tarea habría lugar para el sector estatal, para/la empresa privada y para las entidades intermedias (sindicatos, cámaras empresarias, cooperativas, cooperadoras, mutuales, fundaciones, instituciones deportivas, academias nacionales, colegios profesionales y organizaciones del culto). Todo lo que pudieran llevar adelante las empresas privadas y las entidades intermedias con recursos propios, inhibiría la acción directa del sector estatal.

6. A los efectos de detectar las voluntades disponibles para acompañar el emprendimiento surgen como adecuados los siguientes cursos de
acción:

6.1.) Abrir en todas las oficinas de Correo, un registro de personas e instituciones, dispuestas a participar en tareas inherentes al traslado, indicando que‚ tipo de aporte estarían en condiciones de efectuar;

6.2. En el Registro Automático Permanente de Datos de la Administración Publica Nacional, incorporar un programa para relevar los voluntarios que sobre el particular se
encuentren entre los agentes públicos.

7. Mediante el Registro Automático mencionado en el punto anterior, se puede contar al instante con la cantidad de arquitectos, ingenieros, topógrafos, agrimensores, maestros mayores de obras u otro personal existente en los cuadros de la Administración Publica Nacional en aptitud para participar en el diseño y la construcción de la Nueva Capital sin otra remuneración que la que reciben habitualmente. Este Registro muestra las posibilidades del parque informático oficial como de su idóneo personal, los que se encuentran subutilizados y que en el caso que nos ocupa pueden hacer un aporte substantivo en las tareas de coordinación y movilización aquí sugeridas.

8. Tan importante como las calificaciones del personal señaladas en el punto anterior son algunas estructuras orgánicas de la Administración Publica Nacional. Sea por su misión y funciones, Sea por las experiencias adquiridas por su trayectoria, hay varias reparticiones que cuentan con la aptitud humana y con recursos físicos, jurídicos, documentales, informáticos y aun financieros, para llevar adelante tareas vinculadas con la instrumentación de la Nueva Capital. A titulo ejemplificativo podemos mencionar: Servicio Nacional de Arquitectura; Comando de Ingenieros del Ejercito; Secretaria de Vivienda y Ordenamiento ambiental; Instituto Nacional de Tecnología Industrial, Banco Hipotecario Nacional; Dirección Nacional de Construcciones Portuarias y Vias Navegables; Consejo Nacional de Educación Técnica, Talleres Nacionales Protegidos; Servicio Penitenciario Federal; Servicio Nacional de Parques; Ferrocarriles Argentinos; Dirección Nacional de Vialidad y Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas

9 Un párrafo aparte merecen las posibilidades del sistema universitario nacional, en especial las Facultades de Ingeniería y Arquitectura Mediante un subsistema que posibilitan los recursos telemáticos disponibles, la universidad argentina puede constituirse en un taller de consultoría, investigación y extensión, mediante el concurso de sus claustros docentes y su alumnado . Estaría realizando a mayores es calas, lo que viene realizando a escala reducida y con experiencias desconectadas entre si.

10 Si a través del Registro Automático mencionado, se preguntase Que agente publico, que no sea propietario de vivienda, estaría dispuesto a trasladarse a la Nueva Capital, si se le proporcionara una vivienda que comenzaría a pagar al momento de la ocupación Si se realizara esta investigación quedaría evidenciada la magnitud de los agentes dispuestos al traslado y la masa financiera que actualmente se paga en alquileres y que pasaría a la financiación genuina de las viviendas Como se asume la hipótesis de que la mayoría de los agentes públicos, en especial los más jóvenes carecen de vivienda propia, el limite de los agentes a trasladarse estaría dado por ellos mismos y no por otro criterio estimativo

11 A través del sistema de Formación Profesional del Consejo Nacional de Educación Técnica (CONET}, aquellos agentes públicos que se avinieran, podrían pagar parte de la vivienda que recibieran, trabajando en las obras, previa preparación que recibirían en horas de trabajo y si es posible en sus sitios de trabajo A través de esta misma modalidad del CONET podrían recibir rápidas calificaciones laborales estudiantes, presidiarios, conscriptos, discapacitados y voluntarios en general

12 Con respecto a los servicios públicos (aguas corrientes; servicios sanitarios, energía eléctrica, pavimentos y aceras; gas, telefonía, transporte urbano y fluvial, forestación y cementerio); y teniendo en cuenta que la demanda de cada servicio es una suerte de mercado cautivo y con magnitudes previsibles La propuesta seria que los sindicatos de cada especialidad constituyan una cooperativa con una pequeña y transitoria participación estatal (Articulo 19°, Ley 20.337) y reciban la adjudicación del servicio respectivo en concesión de Obra Publica ( Ley 17 520) La sola adjudicación permitiría a cada cooperativa o a una eventual federación de ellas obtener los financiamientos respectivos Vale agregar que el cobro de los servicios se podría descontar directamente de las remuneraciones de los beneficiados

13 Tanto la figura de la concesión de obra publica (17.520), como la de la anticresis (Capitulo XVI, Código Civil), son las que permitirían la participación del capital privado Nacional y/o extranjero Por ejemplo, se podría erigir por anticresis el edificio del Ministerio de Economía, de la siguiente manera : la inversión privada construye un edificio de diez pisos e instalaciones anexas; cinco pisos son para el funcionamiento del Ministerio y el resto lo explotaría la empresa respectiva hasta recuperar la inversión Si realmente se demostrare que hacen falta mas puentes sobre el río Negro, la actividad privada podría por concesión de obra pública construir dichos puentes y recuperar la inversión por los peajes que tendría derecho a cobrar

14 Una de las múltiples formas de participación del rico tejido de las entidades intermedias en la empresa seria el siguiente Cada entidad que lo solicite recibiría del gobierno, una fracción de terreno para erigir instalaciones para su funcionamiento (sedes, delegaciones, alojamientos, bibliotecas, auditorios, instalaciones deportivas, etc) Para que esas concesiones no caduquen las entidades deberían cumplir estrictamente los requisitos pertinentes (presentación de planos, estudios de suelo, movimiento de tierras, inicio de obras, forestación, cronograma de habilitación) No cuesta imaginar la cantidad de puestos de trabajo que generaría tal forma de ejecución

15 Las restricciones propias de un trabajo periodístico impiden ampliar los desarrollos larvados en los puntos precedentes Pero dichos enunciados son ilustrativos de que una Nueva Capital implementada de una manera parecida a la aquí sugerida es algo posible El carácter monográfico de este trabajo, también insinúa que podría perfeccionarse exponencialmente mediante ulteriores elaboraciones colectivas y multidisciplinarias
No se nos escapa que la metodología aquí propuesta, tiene escasos puntos de coincidencia con la que hasta ahora se viene empleando Pero estamos persuadidos de que la misma enriquece el proyecto y la vigencia del estado de Derecho facilita las rectificaciones.

Nota: Publicado en "La Reforma ", de General Pico, La Pampa Argentina, el 19 de Mayo de 1988 y reproducido en la revista "Participar", de Buenos Aires, argentina N. 81, Julio/Agosto de 1988

La inviavilidad del proyecto de traslado del Congreso Nacional a Rosario - aspectos juridicos constitucionales

Dr. Ricardo Alejandro Terrile


Siguiendo los criterios que han adoptado los períodicos de los paises más adelantados del mundo, la Fundación del diario La Capital convoca a sus intelectuales a un ejercicio de reflexión y aportes de ideas sobre determinados temas estructurales que proyectan el país imaginado, en un marco de libertad, de tolerancia y respeto reciproco, señalando un camino y una metodología de debate que sería importante que la dirigencia politica de nuestro país la imite, sobre todo en éste año electoral donde la discusión se centra sobre aspectos personales de los candidatos y una ausencia manifiesta de programas de gobierno.

El diario ha tomado partido por un proyecto que consiste en el traslado del Congreso de la Nación a la ciudad de Rosario con el fin de promover la desconcentración territorial del Estado Nacional y contribuir a las posibilidades de desarrollo de la ciudad y de su área metropolitana, con la presencia en ella, de uno de los Poderes del Estado Nación.

Fundamenta su convencimiento que el traslado del Congreso provocaría un indudable aumento de representatividad a nivel regional, sobre todo de la denominada región centro (Santa Fe, Córdoba y Entre Ríos) y cuya separación geográfica de los poderes reforzará la independencia en los hechos de los mismos, e inducirá a los legisladores a trabajar más concentrados en la tarea legislativa y menos expuestos a los avatares de la agenda presidencial y ministerial. Esto último resguardará aún más el trabajo parlamentario y su posición dentro del sistema de balance de poder republicano.

El primer impedimiento para ejecutar el citado proyecto es el artículo 3 de la Constitución Federal el cual establece :“las autoridades que ejercen el Gobierno Federal residen en la ciudad que se declare capital de la República por una ley especial del Congreso, previa cesión hecha por una o más legislaturas provinciales, del territorio que haya de federalizarse”. (el subrrayado es mio)

· Literalmente interpretado, al precisar que “..las autoridades que ejercen el Gobierno Federal residen en la ciudad que se declare capital de la República, utiliza un plural, tanto en el concepto “autoridades que ejercen” como en “residen” y se singulariza con “ciudad”, lo que aporta la idea de que los tres poderes deben permanecer juntos en la ciudad que sea declarada como tal.

Por ello hemos sostenido que se ajustaría más a la letra de la Constitución Nacional un planteo de traslado de capital, antes que la separación de los tres poderes. Para que dicho traslado se haga efectivo se requiere de una ley del Congreso que derogue la ley de capitalización vigente (ley 1029), y la 23.512 de 1987 y simultáneamente la legislatura de la provincia de Santa Fe,debe ceder para su federalización, el radio de la ciudad de Rosario donde se instalarían las autoridades nacionales.

El Dr. Diego Giuliano ha sostenido, el pasado 3 de Septiembre, participando de éste enriquecedor debate, la factibilidad de trasladar solamente el Congreso Nacional. Esta argumentación sigue sosteniendo que las autoridades nacionales deben permanecer en la ciudad declarada capital, pero en este caso propone una capital bifurcada o un “complejo capital” que incluya a Rosario conjuntamente con la ciudad autónoma de Buenos Aires.

Esta postura se deriva de una interpretación diferente del artículo 3; la misma sugiere que si bien la Constitución Nacional se expresa en singular refiriéndose a la ciudad que se declare Capital de la República, cuando dispone la necesidad de una cesión previa de parte de las “legislaturas provinciales” lo hace en plural, permitiendo interpretar que la capital puede fijarse en más de una ciudad, desdoblándose de este modo, la localización de las autoridades nacionales. En realidad, ello no es así.

En oportunidad de debatirse en torno al traslado de la Capital Federal a Viedma-Carmén de Patagones, las legislaturas de Buenos Aires y Rio Negro concedieron la cesión de parte de su territorio para su federalización para conformar una sola ciudad con dos riberas. En esa oportunidad, uno de los temas abordados en la Comisión de Asuntos Constitucionales que integré era responder a la pregunta ¿Cuándo se define la existencia de la Capital Federal de la Republica Argentina, si la decisión administrativa dispone que el traslado sea gradual de cada uno de los tres poderes?. La respuesta fue concluyente y determinante: cuando el último de los poderes se traslade y fije su domicilio en el territorio federalizado.

Ello fue consecuencia de la inexistencia de infraestructura edilicia y el hecho que, dispuesta por ley federal, el traslado de la Capital, “al sur y al frio” los tres poderes del Estado deberían esperar la construcción de sus edificios para poder residir y sustentar el marco de capitalización. Ignoro si se conservan las actas mecanografiadas de las sesiones de comisión de esa época pero en en las mismas se respondían a los interrogantes que, en forma consensuada, legisladores de diferentes bloques partidarioas habiamos adoptado.

En el marco de la supremacía constitucional que el artículo 31 de la CN impone, una ley federal, en éste caso, la Ley 1.029, no puede contradecir una norma superior. El Dr. Giuliano interpreta que alcanza con modificar la ley citada, apuntando de esta manera a bifurcar la capitalidad del Estado. De acuerdo a esta propuesta, debe mencionarse la palabra Rosario en el artículo 1 de la ley de capitalización, disponiendo en los artículos sucesivos que el asiento del Congreso Nacional es la ciudad de Rosario, y del Poder Ejecutivo y el Poder Judicial la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.

Ello es contradictorio y resultaría violatorio del citado artículo 31 y del propio artículo 28 de la CN.

Por supuesto, que tanto en el traslado de la Capital Federal como el traslado del Congreso de la Nación, implica además, la previa federalización de la porción del territorio rosarino por parte de la legislatura provincial.

Un querido amigo, el Dr. Cullen manifiesta que no existen obstáculos constitucionales al traslado proyectado, ya que si bien - como lo establece el art. 3- “la ciudad capital es la sede de las autoridades nacionales”, nada impide que pueda residir una parte de la autoridad nacional en otro lugar :“El concepto jurídico de capital es “sede de las autoridades nacionales”, pero nada impide que existan distintas sedes de autoridades nacionales, aunque lógicamente el domicilio legal de la argentina, la capital, será una sola, aquella ciudad donde se asiente en Poder Ejecutivo. Por este motivo ni siquiera es necesario un desdoblamiento de capital. Debemos hablar de una sola capital con varias sedes de autoridades nacionales, siendo esta propuesta totalmente compatible con el artículo 3”[1].

Parte de un concepto novedoso que, sin embargo, no fue el adoptado por los legisladores cuando debatimos la ley 23.512, actualmente vigente.

Cullen sostiene que “El desdoblamiento funcional de las autoridades nacionales no invalida que la capital del país siga siendo una”. ….si el constituyente hubiese prohibido la fragmentación del asiento físico de los Poderes legislativo, Ejecutivo y Judicial, no parece lógica la previsión –establecida en el mismo art. 3 de la CN- de la cesión de territorio por parte de más de una legislatura provincial, debido a que en nuestro derecho público, cada ciudad pertenece al territorio de una provincia y no al de varias, no existiendo ciudades multi o pluriprovinciales.

El artículo 1 de la Ley 23.512, sin embargo, sostiene “ Declarase capital de la Republica, una vez cumplido lo dispuesto por el artículo 5, a los núcleos urbanos erigidos y por erigirse en el área de las actuales ciudades de Carmén de Patagones (Provincia de Buenos Aires) y Viedma y Guardia Mitre (Provincia de Rio Negro), con el terriotorio comprendido en las cesiones dispuestas por las leyes Nros 10.454 de fecha 17 de Octubre de 1986 de la Provincia de Buenos Aires y Nro 2086 de fecha 10 de Julio de 1986 de la Provincia de Rio Negro, que en conjunto constituyen el área de la nueva Capital Federal…….Facultáse al Poder Ejecutivo Nacional para proceder de común acuerdo con los gobiernos de las provincias de Rio Negro y de Buenos Aires al deslinde y demarcación del territorio que se federaliza.

El art. 5 por su parte, expresa “El Poder Ejecurtivo Nacional, previa conformidad de ambas cámaras del Congreso y de la Corte Suprema de Justicia, declarará habilitados los locales e instalaciones suficientes, aptos para el desempeño de las autoridades que en virtud de la Constitución Nacional ejercen el gobierno federal. A partir de ese momento, el territorio del artículo 1 será la Capital de la Republica y las autoridades se constituirán en su nueva sede. Con aquella declaración se operará la plena federalización del área delimitada en el artículo 1 a todos los efectos institucionales, legales y administrativos, cesando en consecuencia las potestades jurisdiccionales provinciales y municipales. Sin embargo, si aún no se ha organizado la nueva justicia nacional ordinaria, subsistirá hasta que ello ocurra la competencia de los tribunales provinciales existentes.

El art. 6 por su parte dispuso que “la ciudad de Buenos Aires continuará siendo Capital de la Republica hasta cumplirse lo dispuesto por el artículo 5…”.

De este modo, el procedimiento jurídico requerido para concretar el traslado del Congreso Nacional a la ciudad de Rosario debe considerar los siguientes pasos a seguir:

- La provincia de Santa Fe a través de su legislatura, debería ceder total o parcialmente el territorio rosarino donde se instalarían los edificios del parlamento.

- El Congreso nacional, según el procedimiento ordinario de formación de leyes, debería sancionar una norma que modifique la ley de capitalización vigente (ley 1.029), disponiendo el nuevo asentamiento del Poder Legislativo Nacional, quedando resuelto de este modo cualquier obstáculo legal.

Los números al respecto son elocuentes: de acuerdo a datos censales de 1991, Capital Federal y la Provincia de Buenos Aires reúnen cerca de la mitad de la población (47,0%), mientras que provincias extensas como La Pampa o Catamarca contienen menos del 1% del total de los habitantes del país. De esta forma, mientras la densidad poblacional es de más de 14 mil habitantes por kilómetro cuadrado en Capital Federal, 32 en la Provincia de Buenos Aires, 51 en Tucumán y 27 en Misiones, un elevado número de provincias -el conjunto de las patagónicas, Catamarca, La Pampa, La Rioja, San Luis y Santiago del Estero- no superan los 5 habitantes por Kilómetro cuadrado.[2]

Otras fuentes también nos han sido útiles al respecto, por ejemplo El Informe de Desarrollo Humano 2001 denominado: “Integración territorial e igualdad de oportunidades: orientaciones para redefinir el federalismo argentino”
[3]. En este análisis estadístico elaborado por el Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), se evidencia claramente que los Indices de desarrollo humano de la totalidad del país, presentan una gran variabilidad entre jurisdicciones.

En este actual estado de situación no queremos dejar de mencionar la postura constitucional al respecto. A partir de la Reforma de 1994, nuestra Constitución Nacional cuenta con una nueva cláusula del progreso que expresa una sinceridad irrepetible en el derecho comparado, nos referimos al artículo 75 inc. 19, en el cual se reconoce explícitamente la debilidad del funcionamiento del modelo federal.

El citado articulo expresa: “corresponde al Congreso” (...) Inc. 19: “promover políticas diferenciadas que tiendan a equilibrar el desigual desarrollo relativo de provincias y regiones”. Con esta expresión nuestra carta Magna ha reconocido y confesado que Argentina es un país desparejo y desequilibrado.

El Dr. Diego Giuliano, considera que es constitucionalmente posible bifurcar la capital del Estado argentino. Se basa en el actual artículo 3 de la Constitución Nacional y aunque admite y reconoce que la norma se expresa en singular, refiriéndose a la ciudad y no a las ciudades que se declaren capital de la República, cuando dispone la necesidad de cesión previa de parte de las legislaturas provinciales, lo hace en plural, permitiendo interpretar que la capital puede fijarse en más de una ciudad, desdoblándose la localización del gobierno. Ha manifestado “..Si el constituyente hubiere prohibido la fragmentación del asiento físico de los Poderes Legislativo, Ejecutivo y Judicial, no parece lógica la previsión de la cesión de territorio por parte de más de una legislatura provincial, debido a que en nuestro derecho público, cada ciudad pertenece al territorio de una provincia y no al de varias, no existiendo ciudades multi o pluriprovinciales. En conclusión, ni la letra ni el espíritu de la Constitución Argentina, prohíben, a mi criterio, una capitalidad bifurcada.

Menciona como antecedentes los casos de Chile, cuyo Poder Ejecutivo se encuentra en la capital histórica de Santiago y el Poder Legislativo a 110 km., en la ciudad de Valparaíso, consecuencia de una constitución promulgada por un gobierno de facto; lo mismo ocurre con los ejemplos de Bolivia, que posee en Sucre la sede de los Poderes Legislativo y Judicial, y en La Paz, la sede del Poder Ejecutivo. En Alemania, luego de la reunificación en 1991, las Cámaras Legislativas llevaron el asiento del Parlamento y del Gobierno a Berlín. Es decir, que unificaron los poderes en esa ciudad, Los Ministerios Federales que permanecieron en Bonn no es el Poder Ejecutivo; como asi tampoco el Tribunal Constitucional Federal que tiene su sede en Karlsruhe, es la Corte Suprema. Cita como ejemplos a Holanda, q ue es una monarquia constitucional, que posee su capital en Amsterdam aunque la ciudad de La Haya, es la residencia del monarca y el asiento del tribunal Superior y del Parlamento; es decir que en ésta última tienen cabida los poderes del Estado, atendiendo a que la Capital es centro económico y cultural y la Haya constituye el centro institucional.

Si el argumento del traslado del Congreso y no de la Capital es para “corregir” la debilidad del funcionamiento del modelo federal, evidentemente no alcanza . Es preciso atacar la distorsion que generan los partidos politicos, la ausencia de reforma electoral, la tergiversacion econbomica que el propio Giulliano expone, al señalar que el “,,,El promedio nacional de PBI per cápita es de 3.322 U$S. En un extremo se encuentra la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, con un PBI per cápita de 11.238 U$S mientras que del otro lado, la provincia de Santiago del Estero posee un PBI catorce veces menor, es decir, 771 dólares per cápita, con un nivel similar al de países africanos pobres, como Buthan y Costa de Marfil…..

La ley 23.512 prevé el traslado de la capital a un territorio perteneciente a tres ciudades distintas enclavadas en dos provincias diferentes, y se logra además, que tanto la provincia de Buenos Aires como la de Río Negro, cedan a través de sus respectivas legislaturas los territorios a federalizarse. Este es un antecedente valioso. Lo que no dice Giuliano es que la ciudad, así copmpuesta que esta separa apenas por un rio y que descansan sobre ambos marebenes, iba a adoptar en la composicion urbana el nombre de una sola ciudad, de la misma manera que lo expresa Estambul, ciudad que no es capital de Turquia pero que descansa parte de su ejido urbano en el contenitente europeo y otro en el asxiatico, comunicado por un puente y su unidad urbana se conforma como un centro unitario perfecamente comunicado.

[2] Censo Nacional de Población, 1991. Fuente Instituto Nacional de Estadísticas y Censos.
[3] El informe de desarrollo humano 2001 se encuentra disponible en http://www.pnud.com.ar/.

"Meditacion sobre el traslado de la Capital Federal argentina"

Por el Licenciado Alfredo Armando Aguirre


Ante el anuncio de la iniciativa presidencial de trasladar la capital federal afloraron dos actitudes extremas: la de los deterministas - pesimistas que piensan o que no se va a realizar o que es una estratagema política; o que el lugar es inadecuado; o que no hay recursos para hacerlo. A lo sumo llegan a admitir que en caso de realizarse nada va a cambiar y todo seguir igual o peor. El otro extremo del espectro en cuyas filas militamos es la de los optimistas - posibilistas. El perfil de esta actitud asume como postulado básico que el traslado de la capital es el prerrequisito de las soluciones argentinas partiendo del hecho que Buenos Aires es la neutralizadora estructural de las posibilidades argentinas.
Y así como los pesimistas - deterministas se abocaron a la tarea de degradar la iniciativa los optimistas - posibilistas venimos dedicándonos a enriquecerla. En esa dirección de enriquecimiento van las meditaciones que siguen. Lo primero que nos parece conveniente explicitar es el arraigo histórico de la idea. Hay testimonios para afirmar que la Idea del traslado nació Junto con la patria. Y ello no es caprichoso ya que hacia 1810 las ciudades y comarcas de "La nueva y gloriosa Nación", venían soportando la hegemonía de Buenos Aires por mas de dos siglos. Esa hegemonía continuo incrementándose a lo largo de nuestra vida independiente y a medida que se hacia mas flagrante se incrementaban las opiniones que sustentaban el traslado como remedio a tamaña situación. Es digno de destacar que esa corriente de opinión era nutrida desde las mas dispares posiciones ideológicas factor que da al traslado de la capital un sitio en el repertorio de las Ideas políticas argentinas.
Si bien las motivaciones para el traslado tienen varias dimensiones superpuestas e interrelacionadas las que se resumen la perentoriedad de la medida son las causales geopolíticas y de calidad de vida.
Pasaron los tiempos de los que profetizaban el peligro que corría la soberanía argentina al sur del río Colorado. Nuestra Argentina insular invadida. Nuestra Argentina marítima (la de las 200 millas) semiocupada. Nuestra Argentina antártica compartida de hecho con las superpotencias del orbe. El cuadro se completa con la proliferación de teorías que pregonan la universalización de las áreas infrapobladas con abundantes recursos energéticos y alimentarios. En otras palabras que en este eufemismo siempre hay un lugar preferencial para nuestra Patagonia. Mas junto al vacío demográfico de nuestras tierras australes y patagónicas convive el hacinamiento de casi doce millones de compatriotas en el Área metropolitana de Buenos Aires y cuadros similares en el gran Rosario, ciudad de Córdoba, el gran Resistencia, San Miguel de Tucumán y el gran Mendoza. En esas aglomeraciones la calidad de vida esta desquiciada especialmente en el conurbano bonaerense. El sentido común viene Indicando hace ya rato que nuestros vacíos debemos llenarlos induciendo a un rápido traslado de millones de compatriota hacia el sur el mar y el frío. Durante mucho tiempo la corriente que pensaba que con medidas descentralizantes (polos de desarrollo promoción industrial tarifas preferenciales etc.) tomadas desde Bueno Aires podía corregir losdesequilibrios pudo Imponer su criterios. Pero como las decisiones políticas ultimas seguían tomándose desde Buenos Aires ‚esta crecía en poderío , y esas medidas eran meros paliativos cuando no simulaciones.
Y todo ello porque no se quería reconocer que la burocracia porteña era un factor de poder y de desarrollo. Desde hace poco mas de cuatro siglos la burocracia colonial primero y nacional luego fue acumulando poder sobre Buenos Aires y una de las maneras mas relevantes y a menudo soslayada es que desde hace casi 5.000 meses.' todos los fines de mes el grueso de los sueldos (y de las jubilaciones y retiros mas jugosos se perciben y se gastan en Buenos Aires. A ello habría que agregar los gastos a los proveedores y entonces podremos explicarnos que‚ implica la permanencia de la burocracia creciente en Buenos Aires y que‚ puede significar esa burocracia en la nueva capital y en los distintos asentamientos por donde se desparramen las sede de las distintas reparticiones nacionales (empresas del estado bancos oficiales nacionales y organismos autárquicos o descentralizados). Si felizmente se concretan esos traslados vamos a comprobar como sin prisa pero sin pausa las decisiones privadas de Indole económico se encaminaran hacia los nuevos centros de decisión político - administrativo. Mas a quienes hemos asumido desde hace tiempo la bandera del traslado nos preocupa por estos días el hacer todo lo que nos sea humanamente posible para extraer de traslado todas las posibilidades que encierra. A tenor de ello venimos ejerciendo un derecho que invitamos también a ejercer a nuestros compatriotas y que es el de imaginar a la nueva capital de los argentinos.
Se sostiene que la ciudad es una de las creaciones mas excelsas de la cultura. Y si la cultura es la esencia de las nacionalidades la nueva ciudad capital debe ser un producto - el mas acabado - de la cultura argentina.
De allí a propugnar que la futura ciudad capital sea concebida por la inteligencia argentina y sea construida por la voluntad argentina hay un solo paso. La ciudad-capital no es una ciudad mas, es la cabeza, capita de una sociedad que busca diferenciarse del resto de las sociedades que conforman el planeta Tierra.
En un tiempo en que la noción de soberanía estatal parece diluirse y tiende a desaparecer, concebir y construir una nueva capital ha de ser una manifestación de profundo nacionalismo cultural que monitoreará el afianzamiento de la Identidad del resto de la Argentina.
La nueva capital debe ser el reflejo de la personalidad argentina de nuestro tiempo. Debe ser concebida y construida por todos los argentinos de buena voluntad que así deseen hacerlo, especialmente por los que van a ir a radicarse junto con los que ya viven en las márgenes del curso inferior del río Negro. Esta propuesta de autoconcepción y autoconstrucción deberla ser ponderada por las autoridades, sobre todo teniendo en cuenta la situación de penuria en que se encuentra el país y de la que difícilmente se salga aun en el largo plazo.
Algún trascendido periodístico dise que la construcción de la nueva capital se financiar en parte con una linea de prestamos blandos, que organismos internacionales han destinado para descongestionar las megalópolis del planeta.
Supongamos que un imponderable ciegue esa posibilidad crediticia. ¿Nos quedaríamos sin traslado? ¿ Por que‚ no pensar en una nueva capital hecha con lo nuestro ?
Hace tiempo que nos formulamos esa pregunta, y aunque nuestra respuesta sea monográfica, ella sugiere que una respuesta colectiva reforzaría lo que nosotros postulamos.
A la nueva capital, como al nuevo país, del que ella ser su adalid, debemos hacerla bajo la premisa de la optimización creativa de lo existente.
Una prolongada lectura de la realidad argentina nos ha persuadido de que existen en nuestra sociedad y en los diversos estamentos estatales los recursos materiales, financieros, documentales, jurídicos e informáticos, así como un idóneo potencial humano, para hacer la nueva capital.
Ello requiere creatividad, participación y un sentido de gesta, de epopeya, de empresa épica. En síntesis, una alta temperatura ideal.
Esos recursos y ese potencial humano están subutilizados. Con una adecuada coordinación (en la que jugarían un papel protagónico los subutilizados recursos telemáticos y su idóneo personal) se podría demostrar que no solo se puede construir una nueva capital sino una nueva sociedad.
Tenemos un potencial humano con calificaciones que pocos países de la Tierra pueden exhibir, rayano en la proletarización intelectual. ¿ Es descabellado pensar que la nueva capital sea concebida y construida por funcionarios, estudiantes, conscriptos, presos y discapacitados?
¿Para que‚ queremos préstamos si los gastos en personal serian similares a los habituales? ¿Alguien pondero los despliegues de las personalidades que con sus cerebros y sus brazos den fisonomía a la nueva capital? ¿Se ha dimensionado la empresa que puede ofrecerse a la juventud argentina? ¿Se ha imaginado el foro de integración nacional, emergente de la conjunción de distintos sectores de la vida argentina?
Por otra parte, el traslado serla solución, para muchos, de un problema estructural de las familias argentinas. Un alto porcentaje de los empleados públicos nacionales no son propietarios, es decir que parte de sus magros salarios los dedican a pagar las viviendas en que viven. Es conocida la restricción que presentan los planes de vivienda para los que alquilan, ya que es imposible pagar simultáneamente alquileres y cuotas de la vivienda propia. En el caso del traslado, si se arbitraran los medios (que los hay) para que los que alquilan puedan comenzar a pagar sus viviendas en el momento en
que la ocupen, serian legión los que quisieran trasladarse y los costos se autofinanciarían sin recursos públicos sino con la masa que pasarían de los alquileres a las viviendas propias.
Incluso a través de los sistemas de formación profesional del CONET (Consejo Nacional de Educación Técnica) podría capacitarse a los futuros propietarios, en sus horas y lugares de trabajo, para participar en la construcción de la nueva capital. De este modo se atenuarla el lógico desarraigo que implica el traslado. Construyendo la nueva capital y sus propias casas se echarían raíces firmes.
Vamos a seguir dando testimonio para que esta deliciosa utopía se realice, porque estamos convencidos de que. cuanto mejor sea la calidad de vida de. Ia nueva capital las decisiones que desde allí se tomen, y que por ende comprometan a la Argentina toda, abrigaran contenidos de la mejor factura.
Compatriota que me hayas leído, soy consciente de las limitaciones de todo trabajo monográfico. Y este‚ lo es, aunque vaya en el toda mi pasión argentina. Si a algo aspira es a invitar a soñar y a concretar en esa nueva capital el paradigma de la Argentina que nos merecemos.
(24/4/87).


NOTA: Publicado En "Senderos Sureños", de General Roca, Río Negro, Argentina, en mayo de 1987 Año 1- Num.1

Por una Desconcentración Demográfica Argentina

Por Alfredo Armando Aguirre
http://choloar.tripod.com/choloar.html


La presente comunicación es una suerte de ejercicio de imaginación.
Parto del supuesto que alguien me pregunte acerca de cual es un factor relevante que contribuiría a la elevación substantiva de la calidad de vida de la actual y futura población del territorio argentino.
Sin mucho meditar daría como respuesta la que da título a la presente comunicación. Ulteriormente comenzaría a deslizar los motivos que soportan semejante respuesta, atento que esa inmediatez está basada en una larga saga de estudios, investigaciones y reflexiones que ultrapasa las tres décadas. Y soportados por intensas vivencias por añadidura.
Cada vez más persuadido de las limitaciones de la palabra escrita, procuro paliar dichas limitaciones con largos preámbulos, que descuento pueden resultar tediosos, pero que a la postre aportan fundamentación pormenorizada a la comunicación.
Dejando en claro que el orden de enunciación no implica precedencia alguna, comienzo por explicitar parte del imprescindible bagaje teórico que se requiere para un abordaje como el que intento. El denominado “pensamiento complejo”, tal cual ha sido consolidado por Edgar Morin, con el patrocinio de la UNESCO, conforma ese bagaje.
Cabe expresar que dicho esquema de conocimiento, admite: la coexistencia simultánea del caos con el orden (la dialógico); entiende que la causa es efecto y el efecto puede ser causa (la recursividad), y asimismo que la parte está en el todo y el todo en la parte (la hologramática).
Sin menoscabar la relevancia de otras fuentes, al momento de comenzar esta comunicación, tengo presente al libro de André Marchal “Estructuras y Sistemas Económicos”, cuya primera edición en francés data de 1955, y “El hombre y sus obras” de Melvin Herkovitzs, cuya primera edición en inglés es de 1948, habiendo sido publicadas en español en 1961 y 1952, respectivamente.
Desde perspectivas holísticas o sistémicas, donde todo esta interrelacionado dinámicamente, resulta evidente que escoger una dimensión de una cuestión o problemática no implica en modo alguno desglosarla del contexto, ni asignarle tipo de prioridad alguna. Tan sólo se trata de una puerta de entrada, en gran medida dependiente de las preferencias o visión del mundo del estudioso de la cuestión.
Así las cosas, y siempre trabajando a nivel de hipótesis y bajo el paraguas conceptual del esbozo, afirmo que el tema escogido implica un juicio de valor positivo y su consecuente juicio de valor negativo.
Es decir: Es bueno para la población argentina alguna modalidad de desconcentración demográfica, y no son deseables los fenómenos de concentración demográfica. Va de suyo en este sentido, que la concentración demográfica es una característica afianzada de la población argentina contemporánea. Esta concentración que no es sólo demográfica: es la resultante del acontecer en estas geografías desde la llegada de los colonizadores y evangelizadores españoles a partir de la segunda mitad del siglo XVI. La misma esta referida a los asentamientos humanos en determinados puntos geográficos y la dotación de recursos naturales disponibles.
Ya hacia el comienzo del proceso de Emancipación en 1810, la ciudad de Buenos Aires, había decantado a través de doscientos treinta años(230), una situación de preeminencia sobre el resto de las otras once ciudades inicialmente fundadas y obviamente a las fundadas luego de la creación del Virreinato del Río de la Plata en 1777. A consolidar esa situación habían contribuido el comercio y el asentamiento de la burocracia colonial. Dicha burocracia tendría continuidad a partir de 1810, y a ello no resulta ajena la figura de Manuel Belgrano, que se había hecho cargo del Consulado de Buenos Aires, desde su creación en 1794. Esta institución cumplía funciones que hoy desempeñan las agencias de estadística, planificación y fomento.

A poco de iniciarse la saga emancipadora, comenzarían las objeciones a la concentración no sólo demográfica de la ciudad de Buenos Aires. Así la logia “Sociedad Patriótica”; José Gervasio de Artigas, y José de San Martín, ya postulaban que Buenos Aires, no fuese la ciudad capital de la nueva Nación. Esa idea atraviesa todo el acontecer argentino, y aún en nuestros días, en contextos mundiales y desarrollos tecnológicos asaz diferentes, hay quien sigue postulando esa idea. Un punto culminante de esa idea desconcentradora, la constituye la iniciativa del presidente Alfonsín, convertida luego en Ley del Congreso, de llevar la Capital Federal a las riberas del Río Negro inferior, a partir de abril de 1986.
No sin antes consignar, que el componente político esta omnipresente en el tratamiento de esta cuestión, la idea del cambio de ciudad Capital argentina, no agota por cierto la batería de propuestas desconcentradoras. Hasta quienes se manifiestan contrarios a dicha mudanza están concordes con políticas desconcentradoras. Durante un largo tiempo, ha campeado entre las personas que se vienen dedicando al tema, una suerte de confusión entre los conceptos de “descentralización” y de “desconcentración”. Admitiendo que están interrelacionados, la descentralización alude a la parte de delegación de responsabilidades en materia de ejecución de políticas públicas, mientras que la desconcentración hace a cuestiones demográficas. La batería de alternativas de descentralización como de desconcentración es amplia y abierta.
Alfred Adler, en su “El sentido de la vida”(1935), sostenía que la “realidad es el mejor experimento”, y esto se vincula, con la creencia durante mucho tiempo, que para que un cambio de capital, tuviese real efecto descentralizador y desconcentrador, la mudanza debería abarcar a la sede de las ahora privatizadas empresas del Estado federal argentino. Hasta se llegó a sostener que si el traslado de la capital no se acompañaba con el “desparramo” de las sedes de las empresas del estado y organismos descentralizados por distintos asentamientos en el interior argentino, su efecto sería mínimo.
Lo concreto, es que el traslado aún no se operó, pese a subsistir la Ley Nacional que lo dispuso y que las empresas estatales y organismos equivalentes fueron privatizados. Dicha privatización, que podía asimilarse al traslado de sus sedes centrales, atento la traumática reducción de personal que emanó de las mismas, prácticamente no produjo ningún efecto relevante en orden a una eventual desconcentración.
No deseo continuar, sin hacer explícita la idea de país que subyace en este planteo, que constituye una actualización de nuestra ya inveterada inquietud.
Imagino una Argentina, estructurada sobre criterios de creatividad, participación, descentralización de los poderes públicos(particularmente de la Administración Pública Nacional o Federal) y desconcentración demográfica.
Posicionados en la dimensión desconcentración, considerada como un componente de la Argentina considerada como un sistema de relaciones interpersonales, no es redundante consignar que atento al último Censo disponible(2001), la población argentina de nuestros dias ultrapasa los 37 millones de habitantes. En función de la participación, vale consignar que existe un padrón de alrededor de 26 millones de electores. La población se distribuye en poco más de mil seiscientos (1600) asentamientos que van desde los 600 habitantes hasta el área metropolitana de Buenos Aires que ronda los 13 millones de habitantes. Además existen, independientemente de la escasa población rural dispersa, varios asentamientos que oscilan entre los 100 y los 599 habitantes.
Cerca de un cuarto de la población se encuentra cursando algún tipo de estudio.
Sin perjuicio de alguna ulterior precisión cuantitativa, puede uno intentar columbrar la resultante de la sumatoria de interacciones que emanan de una masa potencial de casi 38 millones de personas. No se trata de interacciones simultáneas, sino de enésimos encadenamientos, de diferente grados de intensidad, que en alguna instancia entrarán en algún tipo de involucramiento. A esto se le denomina sinergia, y debería ponderarse a los efectos de lo que aquí estamos considerando.
Esa masa de interacciones con ineludibles proyecciones medioambientales, está a su vez inserta en la masa de interacciones que generan los alrededor de 6400 millones de actuales tripulantes de la nave Tierra.
Una cita de Albert Einstein preñada de valor estético, puede ayudarnos a dar el talante anímico para abordar lo que se nos escapa de las manos: “Hasta la más pequeña gota de rocío caída del pétalo de una rosa en el suelo repercute en la estrella más lejana”. (Con su: “Hasta el pelo más delgado/ Hace su sombre en el suelo”; nuestro José Hernández se le había adelantado en su “Vuelta de Martín Fierro”, de 1879)
El “estado del arte”, de los múltiples estudios al respecto que se vienen realizando, con clara tendencia a lo transdisciplinario, y cuya lectura pormenorizada resulta imposible para una sola persona, evidencia las limitaciones de las nociones de control y organización que fueran consideradas como parámetros confiables a partir de la modernidad. Al respecto ha sido señalada como una significativa alegoría de esas limitaciones la novela de Michael Crichton "Jurassik Park"(1990).
Llama la atención, como habiendo comenzado el cuestionamiento a los parámetros formalizados por Newton y Descartes entre otros, a finales del siglo XIX, y explicitados en las tres primeras décadas del siglo que terminó hace poco; llama la atención - repetimos (y aprovecho para dejar constancia que nuestro estilo discursivo emplea el nosotros, como si fuera la primera persona del singular) - que las organizaciones montadas a partir de la modernidad y afianzadas a partir de la convergencia de la Revolución Industrial inglesa, la Independencia Norteamericana y la Revolución Francesa, se consolidaran y expandieran hasta nuestros días, no obstante los anticipos o “pródromos”, que se hicieran insistentemente sobre su pretensión hegemónica y sus limitaciones.
Compartimos la opinión en que no se trata de descartar de plano todo lo aportado por la llamada cultura “euroamericana” u Occidental”, sino de ponerla en un plano de igualdad con otras posibilidades culturales, que pudieron subsistir a los embates llamémosle “occidentalizadores”; e inclusive admitir las alternativas sincréticas que de hecho se vienen produciendo.
En ese sentido, y circunscribiéndonos a la Argentina, los parámetros cuestionados, con las consabidas excepciones, dan sustento a los aparatos formales de los poderes públicos y de la cultura, particularmente en el sistema educativo.
Ello no quita, que por aquello de que “cada hombre(persona) es un mundo”, cada argentino en función de su situación integral específica, vaya procesando el acontecer a su irrepetible manera.
Esta llamémosle “inelasticidad” de las instituciones educativas y culturales argentinas, comporta un incremento del costo, en lo que hace a las capacidades de respuesta o replica de los usuarios de sus servicios. A nadie sorprende que un técnico o profesional, recién comienza a ponerse en autos de las realidades con que debe enfrentarse a partir de su graduación, y la integración de los conocimientos con las circunstancias, lleva mucho tiempo y ello incrementa el “costo argentino”, aunque este marbete haya sido acuñado para otros contextos históricos.
Resulta conducente al esclarecimiento del tema que estamos intentando desenvolver, referirnos a la obra de André Marchal, citada al comienzo de este desarrollo. Allí se consigna que en todo análisis de la realidad se pueden distinguir cuatro especie de estructuras: las físicas o geográficas; las económicas; las demográficas y las de encuadramiento. Marchal sostenía que cuando había coherencia entre las estructuras se estaba frente a un sistema y cuando no la había, como en casi todos los casos concretos se estaba frente a un “régimen”. También señalaba que en todo régimen, se verificaban vestigios de los regímenes anteriores y anticipos o ”pródromos” del porvenir.
Este esquema, se enriquece en nuestra opinión si se lo combina- siempre en el nivel de esbozo - con los aspectos o rasgos que toda cultura presenta, según sostuvo Herkovitzs en la obra también citada al principio. Esos aspectos eran: lo económico y lo tecnológico; la organización social; la relación hombre - universo(religiosidad); las actividades estéticas, y el lenguaje.
Podríamos pues concebir a la Argentina como una sucesión no lineal a lo largo del tiempo, de regímenes donde se combinan esquemas como los de los dos autores precedentemente mencionados.
De ese modo se podría visualizar en sentido figurado el acontecer argentino, partiendo ya sea desde de lo que se sabe de antes de la llegada de los españoles, donde se estima (Canals Frau) que había no menos de cuarenta etnias o culturas diferentes, o lo que con mas información se sabe a partir de esa llegada, ganándose en precisión de informaciones a medida que nos acercamos a nuestro presente.
Lo que sí resulta claro es que a partir de la llegada de los españoles, los habitantes de estas tierras, quedarían incorporados al quehacer mundial, y particularmente a las influencias de las sucesivas potencias hegemónicas.
Ya habíamos expresado, que la idea de desconcentrar, muy ligada a la de descentralizar, había comenzado a explicitarse a poco de comenzado el proceso emancipatorio (hay testimonios a partir de 1812), pero la desconcentración en la variante que hemos escogido en nuestras búsquedas, tiene un precedente en dos obras del polígrafo rosarino Juan Alvarez: “Las guerras civiles argentinas”, de 1914, y “ Buenos Aires", de 1918. En la primera de las mismas, Alvarez consigna un dato muy llamativo y poco conocido. Cuando se realizó el Primer Censo Nacional, en 1869,quienes lo elaboraron, hicieron un cálculo de cual seria la población argentina en 1914. El cálculo fue bastante acertado, en cuanto a la cantidad, al realizarse el Censo de 1914, pero no así en cuanto a la distribución poblacional. El desequilibrio de la ciudad de Buenos Aires, se había acentuado considerablemente.
No es de extrañar que a partir de entonces se incrementaran las voces de alerta sobre este asumido desequilibrio. Pero la realidad iba evidenciando que el desequilibrio se acentuaba. Esa característica de desplegaría a lo largo del Siglo XX, aunque con una ligera atenuación registrada en los dos últimos censos. No obstante, los limites geográficos de la Capital Federal, se vieron desbordados por un proceso de conurbación, configurando la ahora conocida como “Área Metropolitana de Buenos Aires”. Area que se ha transformado en el paradigma de la situación a revertir, aunque vale agregar que se han sumado otras áreas metropolitanas aunque de magnitudes menores y otros centralismos y minicentralismos, para los que caben tratamientos análogos en orden a la desconcentración demográfica.
Resulta muy fecundo a la hora de los análisis pormenorizados, el recientemente incorporado concepto de “visibilidad”, porque en nuestra opinión, y particularmente en los grandes medios de comunicación porteños, no se tiene una visión planar del acontecer argentino, y ello se traduce en fundamentos endebles a la hora de las decisiones tanto públicas como privadas.
Es frecuente que se generalice una opinión sobre “Argentina” o “ los argentinos”, tomando como base al área metropolitana de Buenos Aires y no más de diez grandes ciudades argentinas. Ello incluso es extensivo a las encuestas, los estudios académicos y/o los de consultoría: Cuando uno, como en nuestro caso, por una suerte de vocación o de destino, viene recorriendo por décadas numerosos pueblos medianos y pequeños de la Argentina y lo complementa con lecturas que aun estando disponibles no son consultadas con frecuencia; entonces uno percibe que no necesariamente las cosas son como las presenta “la corriente principal”, que normalmente se reflejan en los grandes medios de comunicación porteños, a los que adscriben en forma casi acrítica, los “grandes medios de comunicación del interior argentino”, conformando una suerte de centralismo comunicacional porteño, por donde no se filtran otras realidades que son simultáneas y diferentes.
El poner entre comillas al adjetivo “grandes”, lo hacemos para diferenciar que hay otros medios pequeños pero alternativos, que nos permiten inferir una diversidad que contrasta con la hegemoneidad predicada por los “grandes”.
Hoy día, resulta casi obvio consignar el creciente impacto que vienen causando la irrupción de las denominadas provisionalmente “tecnologías de la información y la comunicación” (TICs), emblematizadas por la Internet.
Utilizadas creativamente, brindan resultados muy sorprendentes. Vayamos a un ejemplo que ilustra lo precedentemente afirmado. En uno de los sitios mas difundidos de Internet, donde se brindan cuentas gratuitas de correo electrónico, junto con información de interés general, se ha establecido un hipervínculo a todos los medios argentinos de comunicación escritos que han habilitado sus respectivos sitios en la Red. De este modo aparece disponible una información, que en las épocas pre TICs hubiese sido casi imposible de procesar, salvo para organizaciones de muchos recursos. Ahora es posible leer, casi sin costo, las noticias del interior del país y particularmente, las generadas por las corresponsalías de las poblaciones del área de influencia de cada medio. Es una tarea que sólo se puede hacer por muestras, cuando se la intenta de manera monográfica. Pero aun con esa limitación, haciendo un pasaje panorámico por la información generadas por esos corresponsales de pequeñas y medianas ciudades, se tiene “otra visión” de la Argentina.
Como se aprecia el tema de la “visibilidad" da para mucho,
Sea por las vivencias personales, reforzada por la documentación consultada de las maneras tradicionales y de las nuevas, se puede sostener que existen anticipos o pródromos de desconcentración, lo que torna viable proponer alternativas de desconcentración, no tanto creadas sobre situaciones totalmente nuevas, sino sobre situaciones concretas o estudios preexistentes.
Desde el mismo inicio de nuestras comunicaciones públicas a mediados de 1977, manejamos la noción de “Argentina potencial”. Con ella aludimos a todos los estudios y proyectos para abordar problemas concretos de la Argentina, que se han venido acumulando en los distintos archivos y repositorios de información, y muchas veces son casi desconocidos. Así como documentación, existen realizaciones que están funcionando a escala reducida u obras publicas y privadas que están subutilizadas. Podría enunciarse sin temor a caer en exagerar que: Desconcentrar es en gran medida "desempolvar esa Argentina Potencial”.
Reiterando aquello de la “propiedad conmutativa” acerca que": El orden de los factores no altera el producto”, es valido para este desarrollo; todo lo que vamos volcando forma parte del flujo o “fluencia vital” argentinos. Así sucede con los poderes públicos, que en el esquema de Marchal integran “las estructuras de encuadramiento”, y en el de Herkovitzs, ”la organización social”.
Una encuesta publicada al momento de redacción de este trabajo confirma algo que veníamos vivenciando en los todos los ámbitos donde desplegamos nuestra parábola vital: existe una suerte de “analfabetismo “específico en materia de lo que nosotros denominamos poderes públicos, y otros organización gubernamental o estatal. De esta calificación que podrá parecer exagerada, solo se salvan muy pocos especialistas, que constituyen la excepción que confirma la regla.
Argentina, como todo agrupamiento humano, genera desde su propia convivencia, alguna conducta de encuadramiento u organización encarnada en alguna persona que por algún motivo detenta autoridades generalmente transitorias. Resumiendo las ideas expresadas por Gaetano Mosca en su "Elementi di Scienza Politica"(1896): En todo agrupamiento humano; hay lucha por la preeminencia; la lucha esta protagonizada por personas vocacionadas para protagonizarla, que este autor denominaba "clase política", y esa lucha siempre busca legitimarse por una “fórmula política” que justifique moral y/o legalmente la ocupación de las posiciones de preeminencia.
Nosotros agregaríamos que esa lucha por la preeminencia, que aquí se conoce como lucha por el poder o políticas a secas es permanente.
Pese a que desde el inicio mismo del proceso emancipador en 1810, se intentó imponer como sistema de poderes públicos el decantado por la Revolución industrial inglesa, la emancipación norteamericana y la Revolución Francesa; ha sido recién a partir de diciembre de 1983, que el sistema ha empezado ha funcionar a pleno. Excedería los alcances de esta comunicación, el sólo relatar el acontecer de las azarosas y traumáticas situaciones previas.
Con las substanciales reformas institucionales introducidas a la Constitución Nacional en 1994, precedidas en gran parte por reformas en las constituciones de varias provincias, ha quedado configurada una constelación de poderes públicos, cuyo desconocimiento generalizado, nos lleva al juicio de valor negativo expresado mas arriba y que genera una suerte de frustraciones que es casi un imperativo revertir.
Persuadidos de la necesidad de una intensa divulgación de esa constelación, volveremos a reiterarla en estas líneas, comenzando por expresar que sintéticamente: esa constelación de poderes públicos comporta: División cuatripartita de poderes(con la independencia del Ministerio Público), varios partidos políticos con participación de las minorías internas y cupo femenino; así como autonomías provinciales, municipales y universitarias. Solemos apelar a la imagen de una planilla de cálculos informática, para ilustrar fotográficamente esa constelación(la que en la realidad funciona cinematográfica o televisivamente, es decir a treinta(30) imágenes/cuadros por segundo). En dicha grilla, ubicamos en las columnas verticales a los Cinco (5) poderes públicos, a saber: El constituyente; el constituido ejecutivo; el constituido legislativo; el constituido judicial, y el constituido Ministerio Público(defensorías y fiscalías). En las filas horizontales ubicamos las ocho (8) jurisdicciones en que se desagregan esos poderes. A saber: organismos internacionales(ejemplo Naciones Unidas); Mercosur(o la estructura que la reemplace), jurisdicción nacional; jurisdicción universidades nacionales; jurisdicción regiones; jurisdicción provincias, jurisdicciones intermunicipales, y jurisdicciones municipales. Del entrecruzamiento de las funciones y las jurisdicciones surgen cuarenta unidades jurisdiccionales - funcionales, que a su vez se multiplican, por el numero de provincias, municipios, universidades, regiones y entes intermunicipales. Eso sin contar las complejidades de los poderes públicos constituidos nacionales y las complejidades propias de cada unidad, particularmente al interior del ejecutivo nacional.
Si asumimos que las cúpulas de cada una de esas unidades funcionales - jurisdiccionales están ejercidas por personas de vocación política, que por su condición de tales practican permanentemente la lucha por la preeminencia, puede el lector hacerse una idea remota de situaciones signadas por la incertidumbre, la imprecisión y el descontrol.
Aunque esto último pueda resultar duro de asumir.
No debe olvidarse que la ciudadanía participa directa o indirectamente de la elección de los protagonistas principales de los poderes públicos. Esa participación es la que le otorga legitimidad a la constelación sumariamente esbozada.
Esta dinámica y antagónica constelación es el dato o constante, que en nuestra opinión, hay que asumir a la hora de proponer o ejercer cursos de acción desconcentradores.
Es nuestra opinión que esta constelación de poderes públicos manifiesta simultáneamente actitudes concentradoras y desconcentradoras, teniendo la impresión que las desconcentradoras, se imponen a las concentradoras, aunque debe reconocerse que estas últimas neutralizan en parte el potencial de las primeras.
Vistas en un análisis retrospectivo y planar, aun en medio, de las luchas por la preeminencia que alcanzaron virulencias que incluían la ruptura de las reglas de juego establecidas; particularmente a partir de la instalación del Gobierno Nacional en 1862, luego de la batalla de Pavón; los poderes públicos fueron generando políticas y obras publicas, que en algún modo intentaban desconcentrar, sobre todo en nombre del federalismo. En algún modo pueden ser interpretadas como “pródromos” de futuras desconcentraciones o susceptibles de refuncionalización.
La desconcentración demográfica en cualquier punto del planeta es, básicamente un comportamiento humano, en otras palabras un hecho cultural. Es decir, es menester que ante todo el concepto de desconcentración, ha de estar en la mente de los artífices de acciones desconcentradoras. A propósito vamos a relatar un hecho, que nos tocó presenciar en la ciudad de Villa María, en la provincia de Córdoba, y que incorporamos a nuestro arsenal argumental desde entonces. Se realizaba la ceremonia de apertura de un evento deportivo, y lo que pareció al principio, el habitual discurso formal de bienvenida, se transformó al menos para nosotros en algo aleccionador. El orador, dirigiéndose a los deportistas que habían llegado hasta allí desde distintos puntos de la Argentina, les dijo": Ustedes son el centro del mundo". Esa proposición formulada desde el lugar que hacia 1873, fuera declarado por Ley Capital de la Argentina, aunque luego fuera vetada por el presidente Sarmiento, es suceptible de ser interpretada en el sentido que "el centro del mundo" está adonde uno desarrolla su parábola vital. Afortunadamente, hemos comprobado en nuestras travesías por el país de los argentinos, como muchos consideran que su respectivo "pago chico", a pesar de ser considerado como algunos como "infierno grande", es su centro del mundo, y a partir de ese supuesto, obran en consecuencia, a pesar de las interferencias de los diferentes centralismos.
A propósito de nuestras travesías, la inmensa mayoria de ellas las hemos hecho en tren(cuando recién comenzaban los levantamientos de ramales y las clausuras de servicios); en ómnibus, a pié con mochila al hombro; y excepcionalmente por barco y avión: Puedo asegurar desde estas intensas vivencias, que son muy diferentes las visiones que se tienen de la realidad argentina, según el medio en que uno se desplace. Y no es necesario ahondar mucho para diferenciar las visiones de quienes "conocen" la Argentina, viajando en avión a las pocas ciudades que poseen ese servicio o acudiendo a los centros turísticos; que viajando en ómnibus o tren (donde aún quedan servicios), en barco , y mas aún en cualquier modalidad de tracción a sangre ( a pié, en bicicleta o a lomo de mula o caballo). Pareciera; nótese que decimos pareciera, que ya no hubieran émulos que aquellos "naturalistas viajeros", que en los siglos XVIII, XIX y a principios del XX, hacían recorridos "inventariando" la Argentina.
En las alternativas que consideramos, nos circunscribimos a un acto estrictamente voluntario, descartando todo tipo de compulsividad. Resta intentar esbozar como esa especifica actitud voluntaria ha de encuadrarse institucionalmente en el ámbito familiar, en el ámbito empresarial, en el ámbito de las entidades de bien publico y en el ámbito de los poderes públicos. En desarrollos anteriores dábamos énfasis al quehacer de las personalidades relevantes o a los liderazgos. Se nos hace, profundizando en la meditación, que dichas personalidades o liderazgos, necesariamente han de comportarse insertos en sus familias, en las empresas que dirijan o trabajen, en las instituciones de bien publico a las que pertenezcan, o en las estructuras organizativas de los poderes públicos. En resumen que la desconcentración demográfica puede darse en cualquiera de los ámbitos enumerados precedentemente.
De todos modos, nos parece que para que la desconcentración tenga visos de permanencia y no de transitoriedad, debería enfatizarse en las implicancias del cambio de domicilio para las familias. Y es obvio que para un traslado o mudanza familiar, debe haber una intensa motivación en todo el grupo familiar.
Años atrás, dialogábamos con un funcionario publico con responsabilidades en el fomento patagónico, y poníamos énfasis en lo que implica la mudanza de una familia, contraponiéndolo a ciertos megaplanes que proponen desplazamientos de millones de personas para compensar ciertos desequilibrios demográficos.
Se nos ocurre que cualquiera sea el ámbito en que se consideren cursos de acción de desconcentración geográfica en la Argentina, debe partirse en todas las implicancias de la mudanza de cada grupo familiar. E insistimos en que si no hay una fuerte motivación en todo el grupo, esa relocalización o no se operará o será transitoria.
Venimos de un tiempo, donde hemos verificado, el fracaso de la planificación, de la compulsiva y aun de la indicativa. Los planes puntillosamente detallados en los documentos, no suelen pasar de los papeles o son sumamente modificados cuando son puestos a la practica. Planificar esta limitado por la libertad humana. Desde una perspectiva de respecto irrestricto a la dignidad humana, solo se puede motivar o incentivar los cambios de actitudes.
Es por ello, que este desarrollo, está más dirigido a quienes tienen diversos grados de convencimiento acerca de la necesidad de operar una desconcentración demográfica en la Argentina, por considerársela un agente para la elevación de la calidad de vida de sus protagonistas.
En ese sentido, procuramos brindar conceptos e informaciones que refuercen esas convicciones, sobre todo para los que tiene algunas reservas al respecto.
En un planeta inexorablemente e inequitativamente interrelacionado, toda problemática local, no puede soslayar situaciones equivalentes que se dan en otras geografías.
Ni tampoco los abordajes, que esas situaciones merecen a los ámbitos académicos que se abocan a esas temáticas. Así, si bien la concentración demográfica argentina, tiene sus peculiaridades tanto de tipo geográfico como sociocultural, se resignifica a la luz de la corriente de pensamiento que a mediados de los ochenta identificó como problema a la “pobreza de las áreas metropolitanas del Tercer Mundo”. En ese marbete, se encuadraban no sólo en Area Metropolitana de Buenos aires, sino las metrópolis inferiores argentinas.
Lo que no se decía en esa apreciación, ni se colegia para los casos argentinas es la coexistencia de la concentración de pobreza con la concentración de riqueza. Situación que en la década del sesenta era visualizada como el “típico dualismo del subdesarrollo”.
Si bien es cierto que hay elementos de casos teóricos y foráneos para rescatar a la hora de desconcentrar, nos parece que hay elementos distintivos para la Argentina. No es lo mismo la concentración de pobreza en un área metropolitana en un país de escasas dotaciones de recursos naturales y poca extensión geográfica, que la pobreza metropolitana argentina en un contexto de alta disponibilidad de recursos naturales y mucha superficie disponible para el hábitat humano y las actividades productivas.
A cuenta de detenernos mas adelante en la coexistencia conflictiva de actitudes concentradoras y desconcentradoras, en la especificidad del caso argentino; sostenemos que desconcentrar demográficamente en Argentina no debe significar reconcentrar lo que esta concentrado en el área metropolitana de Buenos Aires, en otros grandes centros urbanos ni mucho menos en el Gran Rosario, el Gran Córdoba, el Gran Mendoza o el Gran Tucumán.

Desconcentrar demográficamente en la Argentina de 2005 significa tender a hacerlo lo mas equilibradamente que lo posibiliten la geografía humana preexistente y la localización de los recursos naturales disponibles.
Un documento de referencia muy esclarecedor de estas potencialidades, fue conocido a raíz del debate parlamentario realizado en 1987, tendiente a la mudanza del distrito Federal. A pedido de un Senador Nacional, se publico la zonificación ecológica realizada por el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria, y la que indica en función de un conjunto de parámetros donde están las áreas con mayores y menos disponibilidades de recibir población humana y generar actividades productivas.
Es notable en estos tiempos donde se transita académicamente por el campo de la transdisciplinariedad, regresando de la compartimentación del saber a que había conducido la exacerbación de la “ciencia experimental matemáticamente formalizada”, como se puede verificar en esa etapa personas que desde sus compartimentos casi estancos, se estaban dedicando a estudiar similares y a veces casi idénticos problemas o cuestiones. Así sucede con la llamada Geografía Humana, que uno encuentra tan similar a lo que Rodolfo Kusch denomino "geocultura”. Consideraciones similares se pueden hacer con la Etnología y la Antropología Social y Cultural. En este nuevo marco, con abordajes como el denominado “etnodesarrollo”, no es descabellado conjeturar que los colonizadores y conquistadores españoles, desde sus perspectivas conceptuales fijaron sus asentamientos donde ya lo habían hecho las etnias precolombinas que estaban aquí desde el origen(ab - origen) y transitaban por los senderos por donde estos se comunicaban. Algo de esto se barrunta en los estudios sobre toponimia indígena. La disponibilidad de recursos naturales para satisfacer las necesidades humanas, era el criterio pre y post colombino para determinar los asentamientos humanos. En esa perspectiva, podemos insertar a las doce (12) primeras fundaciones, sobre las que luego se constituiría el Estado Argentino. A ellas se sumarían y casi sobre el final del periodo colonial(con la excepción de las fundaciones en la actual provincia de Entre Ríos) las fundaciones promovidas por los Virreyes y gobernadores españoles, particularmente Vertiz y Sobremonte.
Desde la Emancipación hasta 1862, se fundaron muy pocos pueblos nuevos, pero la acelerada expansión de los ferrocarriles acaecidas entre 1880 - 1914(se escaló desde los 2.500 kilómetros de vías férreas a los 33.000 Km), terminó de perfilar la actual geografía humana argentina. Debe consignarse que esa nueva red, se complementaba con el telégrafo y la navegación de cabotaje marítimo y fluvial. Somos recurrentes en citar la “Guía Azul de las Comunicaciones Sudamericanas”, de 1925, que se puede consultar en la Biblioteca Nacional de Buenos Aires, donde se tiene una visión panorámica de la red que se había configurado, cuando aun el automóvil y la aviación eran incipientes. Allí ya se verifica el sistema de asentamientos humanos interconectado que se había configurado en la Argentina, y que ha llegado a nuestros días, con los desajustes que viene provocando el complejo caminero automotriz, que se sumo traumáticamente a ese sistema, particularmente con la implementación del plan bidecenal de caminos 1934 -1954, la única política publica, que se ha aplicado en la Argentina, por sobre los avatares institucionales. Cabe señalar que el esquema establecido por ese plan, que era la reglamentación de la Ley Nacional 11.658, continuó desplegándose hasta nuestros días y se hizo en desmedro del medio ferroviario y del transporte por agua. De “La Historia de la Ingeniería Argentina”(1968), cuya autoría pertenece al Ingeniero Antonio Vaquer, se puede inferir cual fue el esquema productivo que acompañó al establecimiento de esa red de asentamientos urbanos.
Como ya lo explicitamos en anterior trabajo nuestra propuesta desconcentradora no supone la modificación de esa red de asentamientos, sino su modificación cuantitativa, alentando o proponiendo desplazamientos VOLUNTARIOS de personas desde asentamientos de alta densidad de población hacia asentamientos de baja densidad o en transito de despoblación. Asimismo se ha consignado que existen intentos públicos y privados sobre el particular.
La red de asentamientos fue sumando elementos, como la telefonía, la radiotelefonía, la televisión, la aviación comercial y los diferentes tipos de ductos. Todos con sus permanentes actualizaciones tecnológicas. Al advenimiento de la Internet comercial en la Argentina, ya existía la red telefónica de discado directo nacional, que facilitó su rápida inserción en la red, lo que se viene acelerando con las modalidades de la telefonía celular y las bandas anchas cableadas o inalámbricas.
Sobre la misma red urbana se fue ampliando un sistema educativo, cultural y científico y es así como el sistema educativo tiene escolarizada al 27 % de la población.
En esa red se registran censalmente poco más de 1600 asentamientos, 1440 de los cuales van de los veinte mil habitantes a los seiscientos. Sin embargo, la cantidad de estaciones ferroviarias es por los menos el triple de esa cantidad registrada y tenemos la vivencia que haber transitado por muchos núcleos urbanos, que son registrados como población rural, pero que constituyen núcleos urbanos, de pocos habitantes. Esos asentamientos no registrados censalmente tiene a los efectos desconcentradores un potencial equivalente a los 1440 identificados. El común denominador de ambos es que detentan capacidad instalada ocioso en diversos rubros. Esa capacidad ociosa comporta la capacidad real de recibir el asentamiento de grupos familiares u otras alternativas de migración de comunidades de distintos tipo, por ejemplo de ancianos en una alternativa que hemos denominado "geriátrico abierto"; o una reactualizada "colonización penal"; o el traslado voluntario de agentes de la administración pública nacional asentados en el Área Metropolitana de Buenos Aires. En esta posibilidad podrá contemplarse, el estímulo para los que se encuentren con la jubilación instalada en su horizonte laboral.
Así como señalamos mas arriba, el valor documental de la zonificación ecológica ( se identificaron doscientas zonas) formulada oportunamente por el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria(INTA), nos parece una herramienta muy útil para el fin que alienta este desarrollo, la codificación postal aprobada en 1975. Dicha codificación postal identificó poco menos de dos mil (2000) circuitos postales fuera de la ciudad de Buenos Aires. La codificación postal no hizo mas que institucionalizar a sus fines específicos, líneas de vinculación factibles que exceden la posibilidad postal. Es decir, nos parecen estos circuitos postales un recurso para la acción gubernamental, comunitaria o empresarial en función de los fines aquí claramente explicitados.
La formación de los asentamientos y su “enredamiento” a través de los múltiples enlaces sucintamente enumerados, fue aconteciendo en forma discontinua y se fueron generando esquemas puntuales o regionales de carácter real o potencialmente desconcentradores. Eso sin perjuicio, que a nivel académico, parlamentario o periodístico se sucedieran propuestas tendientes a revertir una situación que se basaba en la percepción compartida de un desequilibrio económico, político y social.
La enumeración dista de ser exhaustiva, pero nos parece adecuado mencionar por orden de aparición cronológica: la Ley de Territorios Nacionales(1532) de 1884; la construcción de la línea férrea desde Bahía Blanca a Zapala, iniciada en 1896 y que llegara a Neuquén en 1899, que daría lugar al emporio del Alto Valle del Río Negro; la Ley de Fomento de los Territorios Nacionales de 1908; la creación de la Gobernación Marítima de Tierra del Fuego y Militar de Comodoro Rivadavia en 1944; el establecimiento de las franquicias aduaneras al Sur del Paralelo 42 de Latitud Sur en Febrero de 1945; la provincialización, mediante sendas leyes del Congreso Nacional entre 1951 y 1955, de los ocho territorios nacionales. Cabe señalar que tanto en el periodo 1930 - 1943, como en el periodo 1955 -1983, en medio de los gobiernos de facto y de gobiernos pseudoconstitucionales (También en el interregno constitucional Mayo de 1973 - Marzo de 1976) se desplegaron numerosas obras públicas y marcos legales con el objetivo explícito de “desarrollar el interior”. Muchas veces la natural reluctancia que causa en los medios académicos esos períodos donde se perpetraron profundas alteraciones en el Estado de Derecho, hace que no se estudien las políticas publicas que en esos contextos de ilegitimidad, se iban materializando y que se incorporaban al acervo de realizaciones. Es nuestra opinión que debe hacerse un esfuerzo académico para ver que detrás de esa imborrable patina de ilegitimidad hay efectivos aportes de marcos legales e infraestructura y sus consecuentes impactos sobre los respectivos hábitats. Cítense por caso el despliegue de los valles regables en Chubut, Río Negro Inferior, Río Colorado y Río Dulce. O las iniciativas generadas desde el Consejo Federal de Inversiones a partir de 1961. Una consideración similar haremos al referirnos a los efectos desconcentradores, de acciones desplegadas en los países fronterizos con Argentina, y aún, en el Sur del Perú.
Mas el despliegue de población sobre el territorio no es asunto exclusivo de los poderes públicos a través de la implementación de políticas, sino que se da en el quehacer empresario y en el de las entidades de bien público. No son infrecuentes los quehaceres conjuntos o consecutivos de lo gubernamental, lo empresarial y lo comunitario
Con las limitaciones que imponen los accidentes geográficos, hay testimonios de intercambios y migraciones de población, cuando no había fronteras interestatales, previas a la formación del Estado argentino, sea en la época precolombina, como en la colonización española. Eso continuó a partir de la emancipación. Están sumamente estudiado los avatares previos a la conformación del patrimonio territorial argentino, los que incluyeron hasta intensos enfrentamientos armados con algunos de los países vecinos. A lo largo del Siglo XX, se fueron consolidando, con la ayuda de la tecnología esas vinculaciones con los países fronterizos: A nivel conceptual nos parece un punto de inflexión la poco mencionada Conferencia de los Países del Plata de 1941, sobre las que se intentaron con diversa suerte las uniones aduaneras con Brasil, Paraguay y Chile y los intentos de unión económica con Chile, Bolivia y Paraguay entre 1953 y 1955. Otro punto de inflexión, pero de efectos más prácticos lo constituye el Tratado de la Cuenca del Plata suscripto en 1967, en un momento donde la mayoría de los países signatarios estaban usurpados por gobiernos de facto. No obstante esa pátina de ilegitimidad, ese tratado tuvo mas efectos prácticos que los Tratados de la ALALC de 1960 y de la ALADI en 1980, porque sentó las bases de la infraestructura necesaria(fundamentalmente puentes y caminos) que generaron las corrientes comerciales, que dieron base así Tratado de Asunción, constitutivo del Mercosur, en 1991.
A los efectos de propuestas de desconcentración demográfica, cuentan estas obras públicas y las corrientes que posibilitan, ya que ciertas zonas de los países limítrofes, genera alternativas de equilibro, particularmente respecto al Area Metropolitana de Buenos Aires. Eso se nota a través del efecto del “superpuerto” de Río Grande, en el sur de Brasil, del mismo puerto de Montevideo y de algunos puertos chilenos del Pacífico, inclusive el puerto de Matarani, en el sur peruano. Todavía sin desplegar se encuentra la Hidrovía entre Puerto Céspedes y Nueva Palmira. Un ejemplo de la utilización de las instalaciones disponibles, a la luz de la creciente penuria de hidrocarburos(tema sobre el que volveremos mas adelante) lo da la empresa brasilera “All Logistics”, que ha tomado las concesiones de los ex ferrocarriles Urquiza y San Martín en el rubro cargas, y de ese modo ha establecido un puente terrestre entre San Pablo(puerto de Santos) y Santiago del Chile(puerto de Valparaíso). También las rutas internacionales facilitan el flujo de pasajeros. Es notable la afluencia de migraciones de los países limítrofes y de Perú hacia el Area metropolitana de Buenos Aires, constituyendo este un factor de concentración. También es notable el desarrollo turístico facilitado por las mismas infraestructuras.
El “hermanamiento” cotidiano de las ciudades fronterizas, también se constituye en un polo de atracción y retención de población, facilitado por las instalaciones a que venimos haciendo referencia. Vale comentar en este apartado pero aplicable a los precedentes y los que siguen, que esta monografía no transita por el camino de la exhaustividad en cuanto a los datos y bibliográficas citadas, porque aquí se transita por el camino del bosquejo al estilo arquitectónico, y queda librado al interés de los lectores la búsqueda de información mas pormenorizada (al respecto, los "motores de búsqueda tipo Google son un muy eficaz auxiliar).
Resulta ya remanido en los ambientes donde se estudia el impacto de las tecnologías de la información y la comunicación, sus efectos desconcentradores y descentralizadores. El E - Learning, el E - Commerce y el E - Government, implican desconcentración y descentralización. En el terreno de la observación del fenómeno en Argentina, se advierte que la apropiación tecnológica es patrimonio del sector infanto juvenil. No resulta tan plástica la asimilación de las generaciones adultas, entre las que habitualmente se recluta la clase dirigente. Sin embargo este es un fenómeno transitorio, ya que paulatinamente esos niños de los ochenta que se aculturaron informáticamente con los jueguitos electrónicos tipo Pac Man, comienzan a ocupar los puestos de decisión pública y privada y en ello visualizamos un incremento al menos exponencial de la calidad de las decisiones.
La tecnología ya en aplicación y la introducción de la tecnología Wi - Fi inalámbrica y en el mediano plazo de los dirigibles geoestacionarios, que reemplazarán a costos supinamente más bajos a los enlaces satelitales, borrarán la distancia comunicacional. De todos modos el equipamiento existente, que dista de ser aprovechado en su plenitud ya es un “pródromo “de lo que viene. Teniendo en cuenta que la población asentada en centros urbanos es el 85 % de la población total, e independientemente de los locutorios de titularidad privada(ya popularizados como "cybers"), en cada centro urbano hay por lo menos una institución muy afianzada en sus respectivas comunidades, que son las “Bibliotecas Populares”, que datan de la presidencia de Nicolás Avellaneda, en 1870. En la última década, se ha equipado a esas bibliotecas con computadoras conectadas a Internet. Esa posibilidad, a la que se le adicionan los “Centros Tecnológicos Comunitarios” instalados con apoyo de organismos internacionales, es la va redundando en una penetración de la telemática en los sectores infanto juveniles, incluso los pertenecientes a familias carecientes.
Ello comporta múltiples posibilidades, que por el momento tienen una restricción: las mentalidades insertas en las instituciones educativas, que no están en aptitud de procesar todo el potencial de elevación cultural y educativa, que se va instilando en las capas infanto juveniles, interactuando con las computadoras en los cybers, en las Bibliotecas populares o en los Centros Tecnológicos Comunitarios. Pero creemos que este desfasaje es transitorio, hasta que arriben a los puestos docentes, de dirección y supervisión, personas imbuidas de la mentalidad “TICs”, que lleva ínsita una suerte de reinvención de las funciones de educación y aprendizaje. Asimismo es concurrente a reforzar posibilidades de desconcentración la sinergia que se crea entre las Tics propiamente dichas, con la radiodifusión en todas sus modalidades y la televisión, tanto abierta, satelital como por cable. Pero las tecnologías, son tan solo soporte de contenidos y los contenidos hacen a las idiosincrasias. Este es un aspecto, sobre el que nos extenderemos mas adelante.

Al recordar el pensamiento de Emerson, en el sentido que: “Tan sólo podemos ver fuera lo que tenemos dentro”, a los efectos de circunscribir lo que sigue, como lo que lo precedió a las limitaciones de toda comunicación monográfica, si algo me llama la atención, es lo que otras personas han apreciado como la “falta de conciencia marítima de los argentinos”. De mi parte desearía precisar como la falta de percepción del plexo de los intereses marítimos, fluviales, lacustres y antárticos argentinos. Esto se me ocurre esta ligado a la cuestión de la “visibilidad”, que deliberadamente es recurrente en la presente comunicación. Y se me hace vincular esto de la “visibilidad” con aquello acerca que “Tan sólo se ama lo que se conoce”. En tránsito a relativizar la afirmación, digamos asimismo que hay sectores, por cierto muy minoritarios, que son la excepción que conforma la regla.
Tal vez el traumático acontecer argentino, permita comprender ese “ocultamiento" de lo marítimo, lo fluvial, lo lacustre y lo antártico, elementos que creo que hacen a la actitud de desconcentración demográfica que apreciamos como funcional a una alta calidad de vida; la que ayudados por las ideas expresadas por Juan Bernardo Pichón Riviere, en su “Ciencia Política General”, publicada a principios de 1971, está compuesta por las condiciones que hacen al “pleno desarrollo de la persona humana y a la convivencia pacífica”.
Síntomas de ese ocultamiento, son el casi desconocimiento de las obras enciclopédicas sobre la Historia Marítima Argentina, dirigida por Laurio Destefani y la historia de la marina mercante argentina escrita por los hermanos González Climent. Debe recordarse los aportes de Roca quien durante su segunda presidencia alentó la creación del Ministerio de Marina y a instancia de Francisco Pascasio Moreno dio inicio en 1904 a la presencia argentina en la Antártida. Dentro del paquete de políticas publicas implementadas en este campo entre Junio de 1943 y Septiembre de 1955,a titulo ilustrativo debe recordarse la declaración de la soberanía del Mar Epicontinental Argentino y del zócalo continental, mediante un Decreto suscripto por el Presidente Peron, en Noviembre de 1946, tomando en cuenta las investigaciones del geógrafo Juan José Nágera, y la intensificación de la política antártica motorizada por el Coronel Hernán Pujato, cuyos planes incluían asentar población en el llamado continente blanco, como se iniciaría a escala reducida a fines de la década del setenta.
Las implicancias de la ratificación del Tratado Antártico en 1960, y el poco efecto que causo en la opinión publica, nos siguen sorprendiendo. Pero más llamativo ha sido, obviamente en nuestra óptica, la falta de percepción masiva de la firma en 1982 y la ratificación parlamentaria argentina en 1993, de la Convención de los Derechos del Mar, que reconoce el principio de las doscientas (200) millas marítimas como zona económica exclusiva del país ribereño, consagrando las tesis adoptadas en aquel decreto de noviembre de 1946, más arriba mencionado. Este tratado que incluso contempla responsabilidades del país ribereño en las 150 millas marinas(1 milla marina equivale a 1.852 metros) siguientes a las 200 sobre el que se le reconoce soberanía económica, en materia de protección del ambiente y preservación de los recursos naturales.
Aun con la presencia intrusa de Inglaterra en las Islas del Atlántico Sur(Malvinas, Georgias y Sandwich) y las limitaciones impuestas por el Tratado antártico, la entrada en vigencia de este tratado, da una nueva dimensión a las posibilidades argentinas. Va de suyo que ello se proyecta a la desconcentración demográfica ya sea desde la costa continental y fueguina, desde la parte insular una vez recuperada y en el mismo continente antártico, con las especiales reservas que presenta su frágil ecosistema.
Vale recordar, a los efectos de sensibilización y divulgación, de los que están mas allá del circulo de entendidos en la materia, que nuestra “Pampa Mojada”(marbete acuñado por el marino Alberto Casella), genera tantas divisas en frutos del mar que las exportaciones cárnicas de la “Pampa Húmeda”, que hicieran famosa a la Argentina. Y el creciente movimiento turístico antártico, con base en la ciudad de Ushuaia, constituye un pródromo del efecto tractivo que la componente atlantártica puede generar, sin desconocer las posibilidades de nuestro desaprovechado sistema fluvial, incluyendo el virtual sistema lacustre natural y artificial.
Como se ha insinuado no es que no se ha hecho nada para desplegar el potencial de los intereses marítimos, fluviales, lacustres y antárticos argentinos, sino que por el factor de ilegitimidad que tiñe el quehacer de los gobiernos de facto que ha tenido el país desde 1930, tiende una patina de ocultamiento atento una parte significativa del quehacer sobre el sector se desplegó en esos periodos de ilegitimidad institucional, particularmente en los dos últimos períodos de facto. Empero tampoco se ha dado relevancia a la sanción de las Leyes Nacionales de Puertos y Federal de Pesca, sancionadas en la plenitud del Estado de derecho, ni mucho menos de la ratificación parlamentaria de la Convención de los Derechos del Mar, ratificación, que atento lo establecido por la Convención Nacional Constituyente de 1994, da status superior a dichos tratados en relación al resto de las Leyes nacionales.

La noción de cultura, es por demás imprecisa, por eso al sólo efecto de poder continuar desenvolviendo esta comunicación, principiamos por adoptar la acuñada por Romano Guardini, quien sostuvo que: “cultura es todo lo que el hombre hace, crea o conforma”. Para ser congruentes con la llamada “corriente del género”, podemos sin ninguna alteración, escribir esa noción como que cultura es todo lo que las personas, hacen crean o conforman. Es casi perogrullesco expresar esa afirmación en tiempo pasado y decir que cultura es todo lo que las personas, hicieron, crearon y conformaron; y atento las invariantes de la condición humana, es hipotizable sostener que cultura es todo lo que las personas harán, crearán y conformarán. Es decir que el pasado, el presente y el futuro del quehacer humano constituirían el flujo o fluencia vital de las culturas especificas, a las que Rodolfo Kusch denominaba “geoculturas”. Mas recordando al Hernán Benítez, de “La aristocracia frente a la revolución”, de 1953, cuando decía que ”tal cual sea la noción de persona que tengamos, será la noción de sociedad y estado”, vale consignar el concepto de persona que nosotros manejamos y que es que la persona es un animal lógico que se comunica cooperativa y/o conflictivamente para satisfacer sus necesidades inserto en su geocultura.
Circunscribiéndonos a los limites geográficos de la República Argentina, tenemos la convicción que en una misma jurisdicción jurídico - política conviven varias “naciones”, entendido el término nación en sentido antropológico o etnológico.
Sostenemos que en la República Argentina, es posible asomarse a sus peculiaridades, si empleamos la alegoría del arco iris, gama o espectro y situamos en un polo al aspecto “transoccidental” de “las Argentinas” donde se ha operado un crisol de arcaicidades entre las arcaicidades propias en las culturas precolombinas, las arcaicidades del componente africano y las arcaicidades de las corrientes migratorias que con distinta intensidad fueron arribando a estas latitudes desde Europa, Medio y Cercano Oriente. Vale aclara que entendemos lo arcaico como aquello que parte del saber tradicional de los pueblos, que algunos asimilan a lo folklórico y que ha sido en distinta medida reluctante a la cultura así llamada cultura occidental o “euroamericana” en sus distintas variantes. Precisamente en el otro polo del espectro arco iris o gama está lo que denominamos como Argentinas intraoccidentales que justamente han sido portadores de esa impronta que algunos identifican con la aparición del logos griego y otros con la conjunción de lo greco- romano- judeo -cristiano.
En el transcurso del tiempo, en parte por la alta fecundidad de las mujeres “transoccidentales “ y la baja de las mujeres “intraoccidentales”, se ha producido una notoria y creciente primacía numérica de la población de cuño “transoccidental”. Ello no obsta para que todo los sistemas formales sean operados por las minorías “intraoccidentales”, cuyos predecesores las instauraron a partir de su llegada a estas geografías.
De suyo que esta convivencia, asume sesgos traumáticos, y la sola consideración nos viene insumiendo largos estudios y meditaciones, en coincidencia con otras personas que en esa misma línea nos precedieron y en simultaneidad con quienes advierten esta peculiaridad de las cuestiones argentinas.
Y es sobre la base de esta convivencia traumática entre las argentinas “Transoccidentales” mayoritariamente crecientes y las argentinas “intraoccidentales” minoritariamente decrecientes, en términos demográficos se entiende, que en nuestra opinión, debería abordarse toda propuesta de desconcentración. Y ello debería operarse - y no nos parece innecesario ser redundante al respecto - sobre la base de una plena vigencia de la constelación de poderes públicos que culmina en la Constitución Nacional Argentina y respetando la voluntad de los intervinientes, es decir respetando las libertades personales propias de la dignidad humana.
En un desarrollo anterior, sosteníamos que nuestras consideraciones sobre alternativas de desconcentración demográfica en Argentina, pasan por variantes diversificadas que asuman como dado, el sistema de asentamientos humanos existentes resultantes del devenir del país, promoviendo cambios cuantitativos desde los asentamientos de muy alta densidad poblacional a los de más baja densidad. Y ello teniendo en cuenta la capacidad de soporte de los recursos naturales existentes en los asentamientos o en sus inmediaciones.
En función del párrafo precedente creemos adecuado, describir el perfil de los asentamientos humanos que venimos recorriendo desde hace casi mas de cuatro décadas. Estas vivencias intensas son las que nos permiten ultrapasar las “invisibilidades” más arriba apuntadas. Pero ese ocultamiento es relativo, por cuanto venimos complementando nuestras vivencias con el análisis de muchos estudios y documentación que retroalimenta las mismas y refuerzan nuestras convicciones. Claro esta, que esa masa documental, pese a estar disponible, no circula con fluidez por los grandes medios de comunicación, ni por medios académicos y consultoriles.
En un desarrollo como el presente, resulta insoslayable recurrir a bucles que nos remiten a afirmaciones realizadas anteriormente. Del mismo modo debemos remitirnos a nuestros propios trabajos, cuyo listado y algunos de sus contenidos están accesibles en el sitio web http://choloar.tripod.com/trabajos.htm
Pero vayamos al nivel de la mera descripción sobre la base de lo vivenciado.
Resulta muy evidente que el sistema de asentamientos humanos argentinos fue configurado por el despliegue de la red ferroviario - telegráfica. Resulta muy ilustrativo, consultar tres mapas que marcan el inicio, el salto exponencial y el máximo nivel alcanzado: Se trata del mapa confeccionado por Martín de Moussy, para ser presentado en la exposición de París en 1869; del mapa editado por la casa Peuser en 1913, y del editado por el Ministerio de Transportes de la Nación, editado en 1950. Su detenida visualización permite realizar sugerentes inferencias. Como nuestro desarrollo esta traccionado por el juicio de valor de la desconcentración demográfica, vamos a poner énfasis en las alrededor de 1440 poblaciones que están en el rango de los 600 a los 20.000 habitantes, así como de los centros urbanos inferiores a esa cantidad. Esto lleva implícito no solo alentar las migraciones voluntarias desde el Area metropolitana de Buenos aires y las otras áreas metropolitanas menores, así como de las capitales de provincia; sino también mantener estables a los volúmenes de los asentamientos menores a esos que acabamos de mencionar, pero que superan los 20.000 habitantes. En números muy gruesos, esos asentamientos que serian alrededor de 120.
Es interesante destacar tomando como parámetro a la red ferroviaria, aún en el avanzado estado de deterioro que se encuentra, verificar que por lo menos existe una cantidad de asentamientos o potenciales asentamientos similar a los 1440 identificados a los efectos de la desconcentración: Es decir trabajaríamos a los efectos desconcentradores con alrededor de tres mil (3000) asentamientos urbanos. Con la excepción de Tierra del Fuego, es casi excepcional que haya centros urbanos fuera de la red ferroviaria. Es mas hay algunos que se instalaron a la espera de un ramal ferroviario, que pese a estar autorizado legalmente no llegó a erigirse, por falta de presupuesto o por haber decaído el interés de los inversores autorizados. No obstante existir varios nudos ferroviarios con asentamientos superiores a los veinte mil habitantes, es dable comprobar que los hay en ciudades del rango que hemos escogido, y que en nuestro entender tienen un potencial a desarrollar, sobre todo teniendo en cuenta el horizonte de una sociedad que deberá movilizarse sin hidrocarburos en un futuro no tan lejano(tema sobre el que volveremos más adelante).
Bueno, diríamos en un lenguaje hablado coloquial, ahora, con el menor nivel de abstracción que nos resulte posible, vamos a describir una suerte de perfil o patrón de estos asentamientos humanos. Perfil que por otra parte también existe en los asentamientos humanos superiores a la magnitud seleccionada.
En nuestros recorridos por los pueblos, particularmente lo hemos hecho con mas intensidad y frecuencia por los de las llamadas Pampas “húmeda” y “Gringa”, hemos visto que todos por lo menos tiene una plaza pública; una estación ferroviaria(la mayoría desactivadas) y con sus instalaciones en forma creciente recicladas como centros culturales a cargo de los Municipios; pequeñas estaciones terminales de ómnibus; más de una escuela primaria; una escuela secundaria; la Municipalidad; un pequeño hospital centro de salud; un templo católico, y templos(varios de las llamadas iglesias cristianas no católicas; casi siempre mas de un club social y deportivo(muchos de estos clubes auténticos pulmones comunitarios se han convertido en mutuales), por lo menos una cooperativa o dos: la de servicios públicos y la agropecuaria; un destacamento policial. En muchos pueblos existen desactivadas las instalaciones de las sociedades de socorros mutuos que los inmigrantes de las distintas procedencias organizaron; como antes lo adelantamos, una Biblioteca Popular; y no en todos los pueblos, alguna agrupación de Boys Scouts, así como un "benemérito cuerpo de Bomberos Voluntarios". La televisión por cable llega a esos asentamientos, independientemente que les llegue la televisión abierta. Lo mismo pasa con la radiodifusión de amplitud modulada. Resulta muy difícil llegar a un poblado que no tenga ya por lo menos una radio de Frecuencia modulada. Cuando uno “curiosea”, en la vida de estas pequeñas comunidades, observa que aparecen las cooperadoras escolares, de los hospitales y de las comisarias. Los Centros de Jubilados y Pensionados son infaltables. Y asimismo la sucursal de algún banco normalmente el de la provincia respectiva y /o el de una cooperativa. Además las mutuales de los clubes hacen operaciones de crédito. También hay un Centro o cámara de Comercio. La vida de las personas insertas en sus respectivos grupos familiares, se encuadra en estas instituciones.
Para no dejar, en lo posible, nada implícito, aunque parezca obvio al menos las 1440 localidades y muchas de las de menor densidad poblacional tienen electricidad, agua potable, servicios telefónicos y la Internet ha entrado en todos esos lugares.
Pero hay algo que por lo obvio no percibe el habitante de esos asentamientos y sí el observador proveniente del enrarecido hábitat metropolitano. Los habitantes de esos asentamientos gozan implícitamente de lo que se perdió en las grandes urbes: LA CALIDAD DE VIDA.
Además de calidad de vida, existe en estos asentamientos, capacidad instalada ociosa, para recibir el asentamiento de nuevas familias en forma paulatina, para no deteriorar esa calidad de vida. Esa capacidad ociosa, incrementa su potencial en la medida que se apliquen o intensifiquen programas existentes de capacitación, asistencia o fomento de la Economía Doméstica, de la que resulta un buen ejemplo el programa de “Huertas comunitarias” que viene desarrollando desde 1990 el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria, que no es mas que una versión actualizada de programas similares que ya se habían aplicado en la Argentina, promovidos por el entonces Ministerio de Agricultura a través de su Almanaque Agropecuario y luego haciendo, uso del medio radiofónico a mediados de la década del cuarenta. Como se colegirá sin mucho esfuerzo, desconcentrar demográficamente, comporta modificaciones en los patrones de producción y consumo de las familias. Y esto se vehiculiza mediante la acción conjunta de las escuelas, los medios de comunicación, los Municipios y las entidades de bien publico(clubes sociales y deportivos, cooperadoras, cooperativas, mutuales, organizaciones del culto, centro de jubilados y pensionados, agrupaciones de boys scouts, cámaras de comercio, sindicatos de trabajadores). Esa acción conjunta, no es algo a realizar, sino un fenómeno que forma parte de la cotidianeidad de estas poblaciones sobre las que nos estamos refiriendo. Y no es exclusivo de ellas porque también se dan en las barriadas metropolitanas o aun en los asentamientos precarios de las mismas, aunque con las limitaciones de la problemática propia de las megalópolis.
Como aquí estamos describiendo un perfil, el mismo varía en los casos concretos, con la agregación o resta de algunos de los componentes mencionados. En estas poblaciones, salvo que se encuentren en zonas de frontera, la única presencia de los poderes públicos nacionales es el correo, esto sobre todo después de las privatizaciones de los servicios públicos. La sinergia comunitaria que se produce tiene el protagonismo, como se mencionó precedentemente, del municipio, de las escuelas primarias y aun secundarias y de las instituciones de bien público. Los sentimientos de comunidad, tal cual los describiera Ferdinand Tonnies en su obra de 1886, se perciben claramente en estos asentamientos, donde, como se dice coloquialmente “todos se conocen”. No es infrecuente que una misma persona participe en mas de una entidad de bien público, o en el Municipio, u otra entidad publica. Por ello, resulta un vaso comunicante entre lo publico y lo privado la institución de la cooperadora, particularmente la cooperadora escolar, ya que vincula a las familias con la escuela. Es esa sinergia comunitaria, generada por la multiplicación de interacciones “cara a cara”, lo que contribuye a la calidad de vida, que paradójicamente no se termina de percibir por sus propios beneficiarios y generadores. No se trata pues de angelizar a las personas que viven estos asentamientos ni de demonizarlos, como lo hizo Dertouzos en el Peyton Place de su “La caldera del diablo”; sino que la baja densidad demográfica, permite un mayor despliegue de las respectivas personalidades( "Lo pequeño es Hermoso" titularía un libro Schumacher, en 1973. Este potencial no pasa desapercibido por algunas instituciones publicas o privadas. Es mas se conocen intentos de aprovechar este potencial. Tal el caso de la existencia de Institutos de derecho Municipal en algunas Universidades Nacionales, por ejemplo Rosario, del Litoral, de la plata y de Córdoba, así como la existencia del Instituto Federal de Asuntos Municipales, que funcionada desde hace poco mas de una década en órbita del Ministerio del Interior del gobierno federal.
Sin soslayar en modo alguno la constelación de poderes públicos existentes, enmarcados en la Constitución Nacional, aparecen como contribuyentes a los propósitos aquí señalados, las nociones de “República Representativa Municipal”, y de “Federalismo Comunalista”, oportunamente expuestas por Alejandro Korn Villafañe y Saúl Alejandro Taborda, respectivamente. En dirección similar están las líneas de promoción al llamado “desarrollo local”, por parte de los organismos internacionales, así como el "principio de subsidiariedad", promovido por la Doctrina Social de la Iglesia Católica Apostólica Romana, en sucesivas encíclicas papales, según el cual: " lo que puede hacer la comunidad menor no debe hacer lo la comunidad mayor". Estas coincidencias, estriban en el reconocimiento de los problemas que generan las metrópolis, desde hace largo tiempo consideradas como causales de desarraigo, y despersonalización. Como suele pasar, las actividades estéticas se anticipan a las problemáticas, en este caso puntual a través del filme "Metrópolis" de Firzt Lang (1927).
Lo que intentamos profundizar en estas líneas, estuvo precedido por una larga retahila de comunicaciones sobre Economía Domestica, cuya estación previa a la presente, es el haber acuñado el neologismo "neorruralización", contraponiéndolo al previo "rerruralización", pues no se trataba de un salto atrás, sino de algo al menos formalmente novedoso aunque enraizado en los precedentes. Tenemos reservas con todo lo "ex- nihilo" en materia de comportamientos humanos, no obstante la irrepetibilidad de las respectivas parabolas vitales de cada persona.
¿ Qué implicancias tiene en la Argentina, del 2005 de la Era Cristiana proponer alternativas de desconcentración demográfica?
Para comenzar esta pregunta puede tener tantas respuestas como supuestos desde donde se parta para intentar responder. En nuestro caso, nuestra respuesta, no obstante estar fundada en varias décadas de observación y meditación, es provisional y limitada por su carácter monográfico amén de otras limitaciones propias.
Hace ya décadas que venimos signados por procesos conflictivos e inequitativos de globalización, planetarización o mundialización. Se percibe una creciente toma de conciencia de esa situación, principiando por lo ambiental o ecológico. Un punto de inflexión, estuvo dado por la Conferencia de Medio Ambiente de Estocolmo de mediados de 1972,que para los argentinos tuvo un anticipo en el mensaje alusivo a las cuestiones que se trataron en ese Congreso, emitido en Febrero de ese año, por el ex presidente Peron por entonces en el exilio. No obstante, así como venía sucediendo por el sistema implícito de gobierno Mundial anidado en la Carta de las Naciones Unidas aprobada en 1945; esta conferencia estaba neutralizada por el curso de la “Guerra Fría”, que culminaría con la finalización de la experiencia del llamado “socialismo real”, precedida por la “perestroika” y la “gladnost”. Algo similar acontecería con iniciativas como la creación del G - 7 en 1975. La “Guerra Fría”, neutralizaba también la difusión de desarrollos tecnológicos: el caso paradigmático es la Internet, con toda sus implicancias, que se había comenzado a implementarse con funciones bélicas hacia 1969.
A partir de la simbólica “caída” del muro de Berlín, comienzan a liberarse los potenciales de las Naciones Unidas, de la problemática evidenciada por la Conferencia de Estocolmo y del accionar del grupo de los 7, que vale recordar núclea a los países industrializados más avanzados del mundo. Tal cual se había anticipado en núcleos académicos, se han “globalizado” tanto los problemas como los soluciones. La Agenda XXI, aprobada por la Eco 92 en Río de Janeiro y la Creación de la Organización Mundial del Comercio, van marcando el paradigma planetario sea par apoyarlo, sea para cuestionarlo, tal como lo vienen haciendo las personalidades y organizaciones que conforman el policromo movimiento “antiglobalizador”. En su momento apuntamos la incidencia del Comunike de Okinawa del G - 8 (ya que al G - 7, se agregó la Federación Rusa y la representación de la Unión Europea) en la declaración de las Naciones Unidas “Nosotros los pueblos”, generada por la Cumbre del Milenio de las Naciones Unidas en el año 2000. Esa incidencia también la operará el reciente Comunique de Gleneagles del G- 8 en los sucesos ulteriores. Cuando uno lee los Comuniques anuales del G - 8, desde 1998, puede columbrar el desenvolvimiento de la agenda internacional. Cabe señalar que a partir de los noventa, el Parlamento argentino ha venido ratificando todos estos acuerdos que adscriben a la Argentina al nuevo orden internacional en curso de implementación. Se nos hace que esta actitud del Parlamento no ha sido suficientemente ponderada, sobre todo teniendo en cuenta que acorde a la Reforma de la Constitución Nacional de 1994,los Tratados internacionales ratificados, tiene jerarquía superior a las leyes.
Hace décadas Angel Monti, viene esclareciendo sobre la necesidad que los proyectos nacionales estén acoplados a proyectos continentales y planetarios.
En ese proceso de acoplamiento debe encuadrarse cualquier alternativa de desconcentración demográfica. Se viene difundiendo mucho la idea de “pensar globalmente y actuar localmente”. Asumiendo dicha premisa al solo efecto expositivo(estimamos que hay una retroalimentación desde lo local a lo global, a riesgo de caer en planteos hemogeneizadores y aun totalitarios) queda clara la estrecha relación entre los procesos que se desarrollen en los niveles nacionales con los que se desarrollen a nivel planetario . Aún en ese caso los asentamientos humanos que hemos visualizados como susceptibles de receptáculos de la desconcentración demográfica, deben ser considerados como componentes últimos(una suerte de “quarks), de un macrosistema planetario integrado de asentamientos humanos.
Y así como los receptáculos de lo que venimos considerando sólo los asentamientos menores de 2000 habitantes, incluidos los que no figuran en los Censos, ha de enfatizarse que el agente pasible de desconcentración, más relevante por su magnitud es el Area Metropolitana de Buenos Aires. Ya en 1985, en nuestro artículo” Argentina: cuestiones por resolver”, sosteníamos que la vulnerabilidad ecológica del conurbano bonaerense era irreversible. Tanto los estudios realizados con posterioridad, como los sucesos que vienen acaeciendo, confirman nuestra observación que nos apresuramos a señalar tiene poco de original. Si bien existen cuadros de deterioros de la calidad de vida en las otras metrópolis argentinas, tienen una entidad cuantitativa sensiblemente inferior a la del área que hay acuerdo en considerar en estado de emergencia de carácter endémico.
Somos recurrentes en señalar, que con las debidas actualizaciones tecnológicas, el esquema de transportes que Argentina había desarrollado hacia 1925, tal cual consta en la "Guía Azul de las Comunicaciones" de Febrero de ese año, resultaría funcional a un esquema de desconcentración como el que estamos desplegando. Ello resulta congruente con nuestra opinión respecto al sistema de asentamientos urbanos que configuro la red ferroviaria y, subsidiaria y coordinadamente, la navegación de cabotaje marítimo y fluvial. Ello es extensivo a las conexiones con los países fronterizos y con el Sur del Perú. Vale recordar que para ese entonces recién estaba desplazándose por la geografía argentina el transporte automotor (que traumática y costosamente neutralizaría a los medios entonces hegemónicos); mientras recién asomaba la aeronavegación comercial y la Marina de Guerra - a modo de pródromo - operaba dirigibles desde su base de Punta de Indio.
Ya hemos señalado como punto de inflexión, neutralizado por la "Guerra Fría" a la Conferencia de Estocolmo sobre Medio Ambiente, de 1972. En el ordenamiento de hitos, reiteramos que, en 1969, aparecía la red Internet. Mas en 1973, con la liberación de la cotización del precio del petróleo por los países integrantes de la OPEP, se desencadenó abruptamente la crisis energética, y consecuentemente la crisis de un sistema productivo mundial, que habia funcionado desde fines de la Primera Guerra Mundial, con un precio del petróleo artificialmente mantenido a dos dólares el barril. Con la liberación el precio se estabilizó cerca de los treinta dólares(en los días que corren ronda lo sesenta). Mas el sinceramiento el precio del petróleo, estaba acompañado con los signos del agotamiento de las reservas de hidrocarburos de fácil acceso. Por añadidura esas reservas no estaban esparcidas, sino concentradas en determinados puntos del planeta. Adicionalmente el sistema productivo movilizado por la energía procedente de hidrocarburos, demostraba que no era inocuo al medio ambiente. Todo ello habia sido anticipado por el Informe Meadows de 1962, así como por los estudios del Hudson Institute y el Club de Roma. No es pues de extrañar,que a fines de los setenta, la Declaración de Macchu Pichu, consignaba que el mundo enfrentaba una triple crisis, obviamente interrelacionada: energética, ecológica y alimentaria.
En un mundo crecientemente interconectado, Argentina no es ajena a esta problemática ni a sus eventuales soluciones. Entendemos que un pais equilibrado demográficamente, en relación de su abundante disponibilidad de recursos naturales, está en mejor capacidad y actitud de contribuir a revertir esta situación, que necesariamente podrá revertirse con cambios multidimensionales.
Uno de los desajustes estructurales que ha padecido la Argentina, tiene como factor significativo la desarticulación deliberada del sistema de transporte ferroviario y de navegación de cabotaje, para permitir la irrupción del complejo caminero automotriz.
Llama la atención, como en los Estados Unidos, tiene en los tiempos que corren, mucha divulgación la cuestión de la "America post- car". Es decir los Estados Unidos después del automóvil. Muchos analistas de ese país, consideran que en el horizonte se ha instalado, en función de la cotización creciente del precio de los hidrocarburos, la desaparición de la primacía del automotor como medio de transporte y la consecuente revalorización del ferrocarril.
En Europa la situación es diferente, atento que como los países siempre tuvieron como limitante la falta de hidrocarburos propios(la excepción fueron los yacimientos del Mar del Norte, cuyos rendimientos son decrecientes), mantuvieron los sistemas ferrotranviarios y de navegación de sus ríos.
No obstante la revalorización de tecnologías ya conocidas como el dirigible, las energías geotérmica, geotermal y maremotriz, la biomasa y el hidrogeno y las esperanzas que se alientan en el plasma caliente y la antimateria, lo cierto que se impone una reconversión que será necesariamente traumática.
Atento las preocupaciones detectadas en esos países avanzados(que han sido recogidas por ejemplo en el Comunique de Gleneagles, mas arriba mencionado), las mismas serán proyectadas a nuestra problemática local. Y más allá de contarnos entre lo que venían preanunciando desde casi tres décadas lo que se cernía sobre ese futuro que hoy tiene visos de presente, nos parece que, atento la creciente mundialización en cualquiera de sus alternativas, hacen avizorar que una Argentina desconcentrada demográficamente sería más apta para asimilar estas problemáticas.
En una comunicación anterior, habíamos hecho consideraciones en la gama de posibilidades que se abren entre las tecnologías adecuadas o apropiadas - enfatizando en la Economía Doméstica o "casera" o hogareña - y las tecnologías disruptivas enfatizando en la tecnologías de los "más livianos que el aire", mas conocidos como dirigibles tanto en sus variantes para cargas o pasajeros como en su variante geoestacionaria de comunicaciones, que bajará exponencialmente el costo a estas comunicaciones soportadas por los costosos sistemas satelitarios.
Al aludir a la noción de gama o espectro, damos a entender que las posibilidades no se agotan ni en la Economía domestica ni en la tecnología de los dirigibles.
Pero en el caso de los dirigibles - tecnología de la que analizamos su evolución desde los inicios de nuestras comunicaciones - vislumbramos amplias posibilidades puesto que con los mismos costos de tracción del transporte por agua( el medio de transporte de más bajo costo), se desplazan a la velocidad de un helicóptero(el medio de transporte más costoso), sin necesidad de instalaciones portuarias y de dragado, como exige la navegación; y sin necesidad de aeropuertos como exige el avión; de rieles como exige el ferrocarril, y de caminos pavimentados, como exigen el transporte pesado automotor y los ómnibus veloces.
Atento la constelación argentina de asentamientos humanos; su potencial para políticas públicas o actividades empresariales, familiares o comunitarias de desconcentración, y teniendo en cuenta que esa constelación fue generada en manera substantiva por el ferrocarril. Y asimismo, teniendo en cuenta el proceso de desarticulación del ferrocarril vía clausura y levantamiento de ramales, entendemos que en cada ramal o tramo de ferrocarril no operable actualmente, habrá que pensar en la tecnología dirigibles atento su economicidad creciente y su versatilidad (Esto es se puede construir y diseñar un dirigible para cada tipo de tráfico). Como señalamos la "disruptividad" de la tecnología de los "más livianos que el aire", no se agota en el transporte sino que se extiende a las telecomunicaciones. Es decir cada dirigible a un costo sensiblemente menor puede soportar a las tecnologías de la comunicación y la información, incluida la modalidad WI- FI, que es la banda ancha", que utiliza la misma modalidad de la telefonía celular.
Aunque en su momento provocó la hilaridad de algún amigo nuestro, la biotecnología aplicada a los caballos percherones y los materiales livianos tipo fibra de carbono, plásticos o aluminio, aplicado a las construcción de carruajes, puede reemplazar a los tractores que se emplean en los asentamientos humanos para la prestación de ciertos servicios públicos de limpieza. Y la lista de posibilidades alternativas y creativas no se agota. Al respecto seguimos divulgando, con las debidas actualizaciones, la iniciativa que presentara José Maria Sarobe en su libro "La Patagonia y sus Problemas", en el sentido de traer camellos bactrianos para los desiertos argentinos, que vale la pena recordar constituyen mas de la mitad de la superficie de la Argentina Continental, dada la versatilidad de ese tipo de animales, que superan con creces, las prestaciones que ofrecen actualmente, sus equivalentes sudamericanos: las llamas.
La Economía Doméstica es el complemento ideal allí donde el mercado resulta inaplicable. El trabajo del chileno Razetto sobre "Economía de la solidaridad y Mercado democrático", es uno de los fundamentos de esta suerte de reinvención de la Economía Doméstica; ahora con más disponibilidad tecnológica y con personas más capacitadas por el sistema educativo, que lo que era posible hace mas de seis décadas cuando se la desalentó deliberada o implícitamente, por las políticas económicas de industrialización insustentables o por el efecto de imitación del "american way of life" irradiado por los medios de comunicación particularmente por el cine y la televisión.
Vale reiterar en esta suerte de consolidación de nuestros desarrollos anteriores, que la Economía Doméstica comporta la producción, elaboración y conservación de alimentos para consumo familiar o para trueque con otras familias vecinas. Además de los alimentos incluye la confección y reparación de calzados y vestuario, la huerta familiar, la crianza de pequeños animales y la pesca artesanal; así como el amamantamiento y otras practicas de higiene y preventivas de la salud. La nómina en modo alguno pretende ser exhaustiva.
La Economía domestica es una herramienta suceptible de desalentar prácticas de consumismo superfluo que han hecho mucho impacto en el universo infanto - juvenil. La Economía Doméstica es algo que se practica con mas frecuencia en los asentamientos que hemos visualizados como agentes receptivos de la desconcentración, lo mismo que en la población rural dispersa. En la cultura de esos grupos de familias, hizo menos impacto la desactivación de la promoción de esas actividades ,tal vez porque, en carne propia vivenciaron que ni el pleno empleo industrial llegó - al menos en forma duradera- y ello comportó que el estilo de vida que veian en las pantallas cinematográficas, en las televisivas o en las revistas que llegaban de la ciudad de Buenos Aires era ilusorio cuando no efímero y frustrante.
En los inicios de esta comunicación nos referíamos a la nocion de pródromos o anticipos. Afortunadamente, cuando se ha tenido la oportunidad de con criterio de "observación participante", recorrer la Argentina y complementarlo con el análisis previo o posterior de la profusa documentación existente, aunque poco divulgada, constatamos que existen numerosas iniciativas empresariales, gubernamentales y comunitarias que espontáneamente están dando respuestas, que denotan la percepción de estas situaciones cuya complejidad podrá inferir el lector o lectora, si ha llegado a esta altura de la exposición.
A lo largo de las comunicaciones escritas que venimos formulando desde mediados de 1977,venimos acuñando algunos conceptos, que resumen las vivencias y los estudios que venimos realizando. Ello se traduce en los títulos de algunas de esas comunicaciones. Postulamos: "Desempolvar la Argentina potencial"; la urgente necesidad de contar con una generación de pontífices(hacedores de puentes), la "optimización creativa de lo existente"; la identificación de algunos "que integran el pais por las suyas".
Me detengo en este último marbete, porque sirve para ejemplificar algunas de esas conductas(porque de eso se trata todo el tiempo), que dan asidero a lo que describimos y postulamos. Resulta que allá por fines de los cincuenta, se generó un traslado de familias con cultura minera desde Tinogasta (Catamarca) y alrededores hacia la ciudad de Caleta Olivia en el Norte de Santa Cruz. Como quedaron afectos en Catamarca, casi de inmediato de generó una corriente de viajeros entre ambas zonas. Habitualmente se juntaban personas de distintas familias para solventar los gastos de combustible del coche en que se trasladaban. Pero, resulta que una vez, un dueño de vehículo no encontró quienes quisieran compartir el viaje y los gastos entre sus conocidos, y entonces hizo publicidad en un medio local. Aparecieron más interesados de los que cabían en su automóvil particular. Y entonces, se le ocurrió, poner una línea de ómnibus entre Caleta Olivia y Tinogasta. Ese fue el origen de la pionera empresa "Ortiz". Eso pasó hace décadas y hoy hay varias empresas - que curiosamente son del interior argentino- que hacen esos trayectos de miles de kilómetros. Conversando con uno de los titulares, de una de esas empresas, nos comentaba que ellos se habían sorprendido, porque habían habilitado un servicio entre las ciudades de Salta y Comodoro Rivadavia, pasando por Mendoza. Lo habían habilitado para nutrirse de los tráficos intermedios entre las distintas ciudades que cubría el trayecto. Pero he aquí que se llevaron la sorpresa de que aparecían pasajeros que hacían el viaje completo entre las ciudades extremas. En este mismo sentido, va la conocida humorada en el sentido que la ciudad más austral de la provincia de Córdoba, no es Huinca Renancó, como indica el mapa político sino Ushuaia. Tenemos la vivencia de corrientes migratorias internas que se generan por fuera del Area Metropolitana de Buenos Aires; esto es grupos familiares que se "desconcentran por las suyas". Ello no quita que en ciudades y pueblos patagónicos como de zonas turísticas sea habitual encontrar matrimonios jóvenes ,matrimonios de "vueltos a casar", y jubilados o pensionados que han "huido" del "infierno porteño".
En torno al eventual cambio de Capital Federal, terminamos de persuadirnos que "mediante una adecuada movilización y coordinación, existen en el sector publico y en la comunidad, recursos de todo tipo y sobre todo un capital humano calificado", para llevar adelante cursos de acción como los que aquí estamos considerando.
Hemos insistido en el tema de la visibilidad. Invito a los eventuales lectores, al menos para que lo asuman a título hipotético, que en la Argentina se han hecho y se están haciendo muchas acciones relevantes, aunque no se las conozca. Hay en esto un problema de comunicación, que sería interesante desentrañar. A mero título de ejemplo, pasamos a comentar lo que sucede con lo que se da en llamar la Distribución Analítica del Presupuesto Nacional anual, que a partir de lo dispuesto en la Convención Nacional Constituyente de 1994, se hace mediante una Decisión Administrativa del Jefe de Gabinete de Ministros. Si bien la misma abarca al presupuesto de los Poderes públicos nacionales o Federales, pueden hacerse extrapolaciones a los presupuestos que aprueban para sus jurisdicciones las Legislaturas Provinciales y los Concejos Deliberantes Municipales o equivalentes. Podría decirse que existe una suerte de "analfabetismo presupuestario", pues muy escasa cantidad de personas analiza el presupuesto y menos como fuente de consulta de lo que se hace con el dinero de los contribuyentes. Este ejemplo también permite columbrar las posibilidades de la irrupción creciente de las Tecnologías de la Comunicación y la Información(TICs). Desde hace aproximadamente un quinquenio los contenidos de esa Decisión Administrativa distributiva analítica del Presupuesto, esta accesible a cualquier persona en Internet. Este es un salto cuántico, que aún no se ha percibido, pero quienes lo hagan verán todo lo que se hace, más allá de los comentarios periodísticos oficialistas u opositores, en la materia. Se puede además inferir retrospectivamente, todo lo que se ha venido haciendo. Esto repetimos hace a la invisibilidad, identificada en este desarrollo como problema.
Vamos concluyendo. Deliberadamente hemos abordado esta cuestión, con todas las limitaciones de lo monográfico. Desde la perspectiva del llamado "pensamiento complejo"( aquel de los principios de la dialógica, la recursividad y lo hologramático).
Asumiendo, lo que en entre otros declaró Homans en su "El Grupo humano", en el sentido que: "la filosofía de un hombre se refleja en lo que él ve", es decir que nuestros conocimientos reflejan nuestra visión del mundo: Con ello, hemos atravesado la cuestión argentina inserta en el devenir planetario desde la dimensión de la desconcentración demográfica. Percibimos actitudes espontáneas o programadas, aunque dispersas y no divulgadas en ese sentido. Tan sólo nos atrevemos a postular su acentuación.
Insistimos que lo que se pretenda implementar debe encuadrarse en el Estado de Derecho que culmina en la Constitución Nacional, y estar signado por la voluntariedad. La pluralidad multidimensional que rezuma la fluencia vital argentina, sugiere no cerrar ningún menú de alternativas y transitar por las que admitan la heterogeneidad.
Respetando lo telúrico y adaptando creativamente todo producto gestado fuera de las fronteras físicas, cualquiera sea la circunstancia espacio - temporal en que se haya incorporado a la aventura humana.
Debemos percatarnos que hay muchos sesgos de homogeneización que vienen de etapas pasadas, que retardarán la materialización de la desconcentración y aún de las descentralizaciones administrativas, pero no la podrán detener.
Como cualquier cambio social estará sujeto a la lógica de la lucha permanente por el poder.
Habrá partidarios de cambiar y partidarios de dejar todo como esta. Hay quienes se benefician con el centralismo y la concentración a pesar de muchos otros. Las actitudes electoralistas; la especulación inmobiliaria, el consumismo contaminante descapitalizador, la "neofobia" a la que alude Wilfredo Pareto en su Tratatto Di Sociologia Generale"(1917); los caprichos en su amplio espectro, y demás lacras de la faz pecaminosa. Pero, como ya lo ilustró Jacinto Benavente, los "Intereses creados" acompañan la aventura humana.
Sean pues estas consideraciones, que necesariamente hemos tenido que hacer algo extensas, para alentar a los que sabemos, aunque no los conozcamos, que están trabajando desde sus "pagos chicos", para elevar la calidad de vida de sus semejantes. O para los que desde la alienación metropolitana, alientan "la vuelta al pago"
Ese es nuestro aporte a una fluencia vital argentina inserta en el flujo vital planetario. Deliberadamente hemos sido reiterativos, con el propósito explícito de acentuar determinados pensamientos, asimilando las reiteraciones al uso del texto resaltado, subrayado o colorido.
Repasando lo escrito precedentemente, a modo de autocrítica, se nos hace que no hemos sabido transmitir cabalmente lo que implicaban nuestras vivencias sobre la temática que hemos incursionado
Deliberadamente hemos transitado el camino del esbozo a la usanza de los arquitectos.
Ya vimos a donde terminaron los planes puntillosos, los organigramas circunstanciados y los manuales descriptivos de tareas. La libertad humana hace tabla rasa con ellos.
Apostemos a la libertad responsable y a la solidaridad, particularmente con los más carecientes para contribuir al pleno desarrollo de las personalidades de nuestros prójimos más próximos en un clima de concordia aún en la diferencia.
( Redacción efectuada en la ciudad de Buenos Aires entre los dias 6 y 24 de Julio de 2005.Interim, cumplimos 58 años de vida)